El programa que dirige Jesús Cintora en Cuatro se supera día a día y sus tertulianos mejoran su oratoria. Hoy ha tenido su momento cumbre mientras Jaime González se batía el cobre con Ernesto Ekaizer y la inefable tertuliana Cristina Fallarás sobre el incidente de Celia Villalobos con el Candy Crush. Con Albert Rivera de testigo.
La mesa de Las Mañanas de Cuatro ponía el grito en el cielo por la poca vergüenza de la vicepresidenta del Congreso, que no contenta con jugar con el iPad que le hemos regalado entre todos mientras su jefe soltaba su discurso y los demás curraban, se permitió el lujo de hacer un corte de magas a los periodistas y salir por pies para eludir preguntas incómodas.
El jefe de Opinión de ABC tenía prisa por entrar en el debate y lo hizo abruptamente antes de que Fallarás soltara su perorata diaria: "Como te gusta a ti decir, la tengo muy grande, cariño", le soltó "¡Oh, My God!", se oyó decir a Fallarás escandalizada.
El exabrupto tuvo la virtud de callar hasta al propio Jesús Cintora, que no amonestó a Jaime González, y todos siguieron discutiendo como si nada sobre la mala educación de la diputada, si debía pedir disculpas de inmediato o expulsarla del partido, del Congreso y de España, si me apuras.