Los peores temores del PSOE quedaron confirmados este miércoles con un sondeo que les relega, por primera vez en décadas, al tercer lugar tras Podemos y el PP. El partido, que no levanta cabeza desde las últimas generales, cuando Rubalcaba cosechó el peor resultado de su historia (28,73%), consigue en este barómetro un porcentaje de voto del 22,2%, 1,6 puntos menos que hace tres meses.
En los anteriores barómetros, los socialistas solían consolarse con el dato del voto directo y culpaban a la cocina del CIS de sus resultados. También sacaban pecho de la popularidad de Sánchez, superior a la de otros. Pero en esta ocasión, se han quedado casi sin argumentos:
Voto directo: frente al anterior sondeo, en que el PSOE, con un 14,3%, se situaba por encima del PP (11,7%), en este barómetro ambos partidos están prácticamente igualados e, incluso, los socialistas (12,4%) se colocan ligeramente por debajo de los populares (12,9%). Podemos obtiene un 19,3%, casi dos puntos más que en el anterior barómetro.
La confianza en Sánchez: la tendencia es descendente. En octubre, un 67,8% declaró tener poca o ninguna confianza en él. Ahora, el porcentaje asciende al 77,9%.
La valoración del líder: a Sánchez le queda el consuelo de que continúa siendo, aunque por debajo del suspenso, uno de los líderes a nivel nacional más valorados. Pero la tendencia también es a la baja: en octubre, logró un 3,85. En este sondeo, el porcentaje baja levemente, a un 3,68.
Voto por simpatía: el primer socialista en valorar el sondeo con los datos en la mano ha sido Antonio Hernando, que se ha escudado en un dato poco relevante en términos estadísticos: el voto por simpatía o cercanía. El PSOE ha defendido que ahí sí son los primeros, con un 16,6%, frente a PP (14,4%) y Podemos (15,9). Pero no ha dado otro dato relevante: en el anterior sondeo, también fueron los primeros y con un porcentaje mayor (18,3%). Tampoco en este apartado hay, pues, buenas noticias para el partido.