Mas abre "embajadas" en Roma y Viena y anuncia otras cincuenta más

La quiebra técnica de la Generalidad no supone ningún impedimento para que Artur Mas acumule esfuerzos en el proceso separatista, que es para lo único que hay sobrados recursos y aumento de las partidas anuales en una administración conectada al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) para pagar las nóminas de sus funcionarios.

En un contexto de ajustes en áreas tan sensibles como la sanidad y los servicios públicos, la Generalidad activa todos los resortes a su alcance para difundir en cuantos foros internacionales estén a su alcance que España no es una democracia real y que el Estado impide a los catalanes el "derecho a decidir". El último paso se anunció este lunes, con ocasión del nombramiento de dos nuevos "embajadores" y la apertura de las consiguientes "delegaciones" de la Generalidad en Roma y Viena. El joven Roger Albinyana, de 35 años, es el secretario de "Asuntos Exteriores" que comunicó a TV3 los nombramientos de Luca Bellizzi, militante convergente, según subraya la televisión autonómica, para Roma, y del "consultor de proyectos internacionales" Adam Casals en Viena.

Las "embajadas" catalanas de estas dos capitales se suman a la representación exterior en Washington, Nueva York, Londres, Berlín, París y Bruselas. En París acaba de tomar posesión el periodista de TV3 Martí Anglada, recientemente retirado como corresponsal en Berlín y Bruselas. Y en esta ciudad, otro periodista, Amadeu Altafaj, que fuera portavoz de la Comisión Europea, es el nuevo representante del gobierno regional catalán ante la Unión Europea.

El caso "Independent Diplomat"

Las relaciones exteriores de la Generalidad han sido un completo fiasco, pese a las ingentes cantidades de dinero vertidas en propaganda y embajadas. La mala gestión ha llegado al punto de que la Generalidad ha contratado a golpe de talonario toda clase de "think tanks", asesores y asesorías como "Independent Diplomat" para intentar "internacionalizar" el proceso separatista.

A pesar de todo, Mas no renuncia a su gran objetivo de convertirse en un "líder internacional", tal como lo calificaba TV3 con ocasión de su presencia en una fila marginal de la manifestación de París por los atentados islamistas. A tal efecto y con gran regocijo, Roger Albinyana anunciaba a la televisión pública y nacionalista el inminente despliegue de un ambicioso plan para abrir 50 embajadas repartidas por los cinco continentes, tal como destaca ese medio de comunicación en su propia página.

Antes de la última bronca entre CiU y ERC se sugirió la posibilidad de elevar de rango la secretaría "d'Afers Exteriors i de la Unió Europea" y convertirla en una consejería que iba a ser ocupada por ERC en la que entonces parecía su inminente entrada en el gobierno de Mas.

La Generalidad cifra el coste de sus delegaciones internacionales en unos dos millones y medio de euros, gastos de personal al margen. Sin embargo, la suma de organismos y de partidas desviadas de las consejerías a la "acción exterior" elevan la cifra hasta más allá de los treinta millones de euros anuales, en los que tampoco se cuenta, por ejemplo, la inserción de publicidad en los medios internacionales, las entrevistas contratadas por Mas o el contrato secreto con "Independent Diplomat", que ademas de Cataluña, lleva la representación exterior de Somalilandia.