La juez que investiga la fortuna oculta del expresidente catalán Jordi Pujol ha acordado mantener su interrogatorio como imputado, previsto para el próximo martes, al considerar que no se puede "aceptar a ciegas", sin más comprobación, su explicación de que los fondos proceden de una herencia familiar.
En un auto, al que ha tenido acceso Efe, la titular del juzgado de instrucción número 31 de Barcelona ha desestimado así el recurso que presentó la defensa del expresidente catalán, su esposa Marta Ferrusola y tres de sus hijos contra su imputación por delitos contra la Hacienda Pública y blanqueo de capitales, por lo que están citados a declarar el próximo martes 27 de enero.
La juez cree que, si bien por el momento no cabe presumir que el origen de los fondos ocultos sea ilícito, "ello no significa que haya que aceptar a ciegas, sin realizar ninguna comprobación, la explicación ofrecida por el señor Pujol, primero en su comunicado y, posteriormente, en su comparecencia en el Parlament, de que tal patrimonio procedía de un legado de su padre (...)".
De hecho, la instructora cree que, más que la regularización de los fondos ocultos, lo "realmente trascendente" en esta causa es "la ocultación de unos fondos en el extranjero cuyo importe real no queda aclarado", a lo que se añaden "las escasas explicaciones ofrecidas sobre esos fondos y la nula acreditación de las operaciones realizadas con ellos durante más de treinta años".
Para la magistrada, "no hay duda del derecho de la defensa a ofrecer la versión que le resulte más conveniente a sus intereses", pero eso no impide a los tribunales llevar a cabo las investigaciones que crean oportunas, máxime cuando "las explicaciones dadas al respecto han sido incompletas y contradictorias".
La juez cree que resulta "esencial" saber a cuánto ascendían los fondos de los Pujol cuando falleció el padre del expresidente y a cuánto en julio de 2014, para aclarar "si los segundos traen causa de los primeros y si efectivamente fueron regularizados en su integridad".
En opinión de la magistrada, es "obvio" que las primeras diligencias de investigación que deben acordarse es la declaración de los titulares de los fondos ocultos y del propio Jordi Pujol, "ya que son quienes están en mejor disposición de facilitar la información necesaria".
En ese sentido, el auto recuerda a los imputados que, "si la versión que quieren hacer valer es la que se corresponde con la realidad, no les será difícil hacerlo aportando información sobre sus cuentas bancarias (...)" y los procesos de regularización de los fondos ocultos.
Ello, según la magistrada, "ayudará a acreditar, en apoyo de sus tesis, que los fondos provienen de una herencia o incluso de actividades llevadas a cabo en fechas tan anteriores que obligaría a apreciar el instituto de la prescripción".
La juez insiste también en que los Pujol "tienen en su mano" confirmar que la regularización fiscal fue completa y que "en los depósitos bancarios de Andorra no hay más fondos que los que se relacionaron en las distintas declaraciones complementarias".
Asimismo, la instructora recuerda que, como ya advirtió la Audiencia en el auto en que avaló la investigación a los Pujol, si la causa se mantuviera abierta sin detallar la participación de una persona determinada en un hecho delictivo, se correría el riesgo de que éste llegara a prescribir.