El titular del Juzgado de Instrucción de Palma José Castro ha dictado este lunes el auto de apertura de juicio oral donde considera que la infanta Cristina debe ser juzgada como cooperadora necesaria de dos delitos fiscales cometidos presuntamente por Iñaki Urdangarín a través de la sociedad pantalla Aizoon.
Tal y como recoge el propio juez en la resolución, contra este auto no cabe interponer recurso. En consecuencia, Cristina de Borbón y Grecia será la primera infanta de España que se sentará en el banquillo de los acusados.
Una vez que Castro ha decidido no aplicarle la denominada 'doctrina Botín', a la infanta le queda la posibilidad de que su defensa vuelva a solicitar que se tenga en cuenta la misma en la fase de cuestiones previas del juicio. Será el último cartucho que le quedará a la hermana del Rey para evitar ser juzgada.
En el auto de apertura de juicio oral, José Castro da un plazo de veinte días a los acusados para que presenten sus escritos de defensa. Tras este trámite, el caso Nóos -cuya instrucción ya ha finalizado- será remitido a la Audiencia Provincial de Palma para celebrar la vista oral.
Se da la circunstancia de que con la última creación de plazas judiciales por parte del Gobierno, la Audiencia de Palma verá reforzada sus secciones que a partir de febrero que pasarán a tener seis magistrados cada una de ellas en vez de los cuatro que tienen actualmente tanto la Sección Primera como la Sección Segunda de este órgano. Esto permitirá agilizar los señalamientos de los juicios.
Fuentes jurídicas consultadas rechazan dar una fecha exacta para la celebración de la vista oral del caso Nóos -especialmente compleja dado el ingente número de acusados y las fuertes medidas de seguridad que se deberán adoptar- aunque señalan que es altamente probable que la misma se celebre a lo largo de 2015.