"La agente muerta en el atraco de Vigo no habría fallecido de haber llevado un chaleco antibalas"

Los hechos sucedían sobre las 14.30 horas de este viernes. Varias llamadas al 091 alertaban de la presencia de un individuo en una sucursal bancaria de Vigo donde se podría estar cometiendo un atraco. Hasta allí se desplazaron varias patrullas de policía. Vanesa M.L.C., de 36 años, recorrió a pie los escasos metros que le separaban del banco desde donde había aparcado el coche patrulla. Iba junto a Vicente J.A.V., subinspector de 41.

Se situaron en el lateral de la sucursal y comprobaron que el asaltante había cogido como rehén a la subdirectora de la sucursal, de 36 años. Otros dos agentes más apoyaban el operativo. En ese momento el atracador salió y pistola en mano "vació el cargador" contra la agente, que quedó tendida en el suelo. Su compañero, el subinspector de Policía, también resultó herido de gravedad, así como la rehén, que intentó zafarse de él pero recibió un disparo en el brazo. Esta última está en el hospital pero no se teme por su vida.

Los servicios de emergencia llegaron a la zona y consiguieron reanimar a la joven in situ, pero acabó falleciendo fruto de la gravedad de sus heridas. El subinspector fue trasladado a otro hospital intervenido de urgencia. En un primer momento, fuentes del Ministerio del Interior aseguraron que este segundo policía había fallecido, pero más tarde corrigieron la información. Vicente J.A.V. está grave.

Desde el SUP en Vigo, han denunciado en En casa de Herrero, de esRadio, que los policías no llevaban chalecos antibalas. "Si tuviéramos chalecos antibalas individualizados, que debería darse desde el primer momento en que entras en Ávila (en la Academia Nacional de Policía) no estaríamos hablando ahora de un fallecimiento, estaríamos hablando de un herido sin más", afirmó su secretario Víctor Vasco.

"No se puede escatimar en seguridad. Estos chalecos nos tienen que llegar ya a todos los funcionarios de policía que estamos trabajando en la calle". Esa una petición que han realizado hace tiempo, pero llegan "a cuentagotas". A la unidad a la que pertenecían los dos agentes -la policía fallecida y el subinspector herido- que es la UPR (Unidad de Prevención y Reacción) "son 30 funcionarios y ninguno de esos funcionarios tiene un chaleco antibalas individualizado", denunció Vasco.