Ha sido el delegado del Gobierno andaluz en Sevilla, Francisco Javier Fernández, designado por José Antonio Griñán y mantenido por Susana Díaz, el que ha forzado e instigado el homenaje y reconocimiento a Francisco Rodríguez Galán, ex alcalde socialista de San Nicolás del Puerto(Sevilla) que se vio implicado en el caso de los ERE que investiga la juez Mercedes Alaya, pero que falleció antes de su imputación. Su implicación derivaba del hecho de que, amigo personal del ex director general Francisco Javier Guerrero, destinó parte de una ayuda del fondo de reptiles para fomento del empleo a comprar para este Ayuntamiento una finca en la que estaba ubicada su propia vivienda. Ecologista en Acción se ha opuesto al polémico homenaje aunque no lo menciona en sus revistas ni en sus páginas web.
El delegado de la Junta, Fernández ocupa ahora de forma interina el puesto que dejó vacante el ex alcalde de San Nicolás del Puerto en la Junta Rectora del Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla tras su muerte y, al parecer, la justificación del homenaje es sólo que Rodríguez Galán había presidido el mismo órgano rector del parque.
Por ello, dicha Junta Rectora del Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla, en manos desde sus primeros tiempos del PSOE de Sevilla y muy vinculada a la zona de El Pedroso, aprobará mañana rendir un homenaje a quien fuera su presidente en los últimos cuatro años y medio. El problema es que el último presidente no fue otro que Francisco Rodríguez Galán, ex alcalde de San Nicolás del Puerto que se vio implicado en el caso de los ERE que investiga la juez Mercedes Alaya, pero que falleció antes de su más que previsible imputación.
Recuerda El Mundo que el 5 de febrero de 2003, el entonces director general de Trabajo y Seguridad Social, Javier Guerrero -uno de los principales imputados en el caso de los ERE-, firmó un protocolo de colaboración con Rodríguez Galán por el que Empleo se comprometía a conceder una subvención de 871.467,50 euros para financiar el «proyecto de viabilidad generador de empleo» presentado dos meses y medio antes por el Ayuntamiento de San Nicolás del Puerto. Pero La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil concluyó que si bien los fondos públicos se libraron «para el desarrollo y fomento del empleo en la localidad», se terminaron destinando a «regularizar la situación de los habitantes del poblado del Cerro del Hierro», entre los que se encontraba el propio regidor, que se habría beneficiado, según las tesis de los investigadores, directamente de la subvención.
Las relaciones entre Rodríguez Galán y Guerrero (que fue alcalde del vecino pueblo de El Pedroso) eran muy estrechas, hasta el punto de que este último le concedió también una ayuda de más de 50.000 euros para levantar una estatua al minero en cuyo pedestal aparecían los nombres de ambos.