Tal día como hoy, 16 de octubre, pero de 2013, Libertad Digital contaba en su portada las polémicas declaraciones del cantante Albert Pla antes de dar un concierto en Gijón: "A mí siempre me ha dado asco ser español, como espero que a todo el mundo. Me gustaría que los catalanes fuéramos independientes y que en Gijón se estudiara el catalán por cojones, igual que nos pasa a nosotros ahora".
Ante esas declaraciones, el consejo de administración del Teatro Jovellanos se reunió para aprobar la suspensión del concierto de Albert Pla. Además, desde el Ayuntamiento de la ciudad asturiana se planteó la suspensión de la actuación después de que el Grupo Popular solicitase la rescisión del contrato por "insultar gratuitamente a los gijoneses". El concejal del PP señaló que las manifestaciones del cantautor catalán "son un grave insulto que no debe quedar sin respuesta". A su juicio, "no es de recibo" que un teatro municipal que pagaban "todos los ciudadanos dé cabida a la actuación de quien demuestra una absoluta falta de respeto hacia los gijoneses y españoles”.
Tras la polémica, Albert Pla dijo que le importaba "un rábano" que le suspendieran el concierto de Gijón porque ya estaba "acostumbrado a la censura" e indicó que "no es la primera vez que me pasa, no es la primera vez que no me dejan sacar un disco o no me dejan actuar". En una entrevista a una emisora catalana dijo que "si llego a saber que se armaría este pollo, no lo digo ni loco", aunque más tarde se reafirmó en sus declaraciones: "Claro que pienso que me da asco ser español, y más esta mañana".
Meses más tarde volvió a sembrar la polémica. Después de salir del hospital tras sufrir un infarto que le obligó a cancelar algunos de sus conciertos, afirmó que "en Cataluña, todos somos catalanes y los españoles son unos tíos que vinieron a jodernos. Nos han educado así, es inevitable, todo el mundo odia al Real Madrid, el facherío, Franco, la Guerra, los guardias civiles, la persecución al catalán, que yo me llame Alberto…". A continuación dijo que "el español es muy nacionalista" y que lo que le encantaría sería que "Cataluña fuese independiente". Eso sí, reconoció que "no voy a mover un dedo para ello. Tampoco sé si me encantaría; me la suda, no le doy ninguna importancia".