La Audiencia Provincial de Palma ha comenzado este jueves a tramitar las recusaciones que el sindicato Manos Limpias ha registrado contra dos de los tres magistrados que deberán decidir si la infanta Cristina debe sentarse en el banquillo de los acusados por dos delitos fiscales y otro de blanqueo de capitales o si, por el contrario, debe estimarse su recurso contra la decisión del juez José Castro de procesarla por dichos delitos y archivar así la causa contra ella.
El sindicato Manos Limpias ha solicitado apartar a los magistrados Diego Gómez Reino y Mónica de la Serna de estas deliberaciones porque formaron parte del tribunal que en mayo de 2013 revocó de forma parcial la imputación de la hermana del Rey: "Los dos magistrados que recusamos ya intervinieron en la fase instructora en la decisión y decidieron la desimputación de la infanta Cristina de Borbón por su labor al frente y miembro del Instituto Noos de los presuntos delitos que en el seno del mismo hubiera podido cometer", señala el escrito redactado por la letrada Virginia López Negrete, al que ha tenido acceso Libertad Digital.
En consecuencia, esta acusación popular sostiene que ambos magistrados están contaminados y que, al ser una decisión judicial tan importante la que está en juego -el futuro procesal de la Duquesa de Palma- ", la pulcritud en la imparcialidad de los jueces que ahora deban de resolver los recursos de apelación, y más concretamente el referido, insistimos, a la infanta Cristina, no puede venir de la mano de ser ahora los dos magistrados Gómez Reino y De la Serna, los que, habiéndose ya empleado e implicado en la desimputación de la Infanta Cristina, con todo el revuelo mediático y jurídico que tal resolución".
"Justamente ellos son los magistrados que nunca debieran de decidir, nuevamente, sobre el tan importante recurso", añade el escrito de Manos Limpias.
Por su parte, la Sección Segunda de la Audiencia de Palma ha dado este jueves un plazo de tres días a las partes para que se pronuncien sobre la solicitud de recusación de Diego Gómez Reino (designado ponente de todos los recursos de apelación) y de su compañera Mónica de la Serna.
Posteriormente, ambos magistrados deberán pronunciarse sobre si desean o rechazan apartarse de esta causa después de haber sido recusados. Si voluntariamente no se apartan, entonces el incidente de recusación se enviará al presidente de la Audiencia Provincial, el magistrado Carlos Gómez Martínez, quien designará un juez instructor que estudiará y elaborará una propuesta sobre dichas recusaciones.
Más tarde, los expedientes se elevarán al Tribunal Superior de Justicia de Baleares que tendrá la última palabra para decidir si se debe apartar a esos dos jueces de la deliberación y fallo sobre el futuro judicial de la infanta.
Según fuentes jurídicas consultas por este periódico se desconoce si la tramitación de estas recusaciones retrasará el procedimiento judicial denominado caso Nóos.
A priori, estaba señalado el próximo día 23 de octubre como el día que se iban a resolver todas las apelaciones presentadas por Cristina de Borbón, su marido Iñaki Urdangarín o su exsocio Diego Torres, entre otros. Quizás estas recusaciones contra dos miembros de la Sala retrase dichos fallos.