
El 16,3% de la población española lucharía por su país en el caso de que sufriera una agresión extranjera, y un 47,1% no sacrificaría su vida por nada ni nadie que no fuera su familia, según una encuesta elaborada por el CIS -y encargada por el Instituto Español de Estudios Estratégicos.
En total, un 55,3% rechazaría o se mostraría reacio a tomar parte en la defensa de España si fuera atacada. Además, un 22,4% sería más bien proclive a participar. Ambos porcentajes bajan de año en año.
En varias comunidades autónomas hay también un retroceso del sentimiento de pertenencia a España. Las CCAA que sufren más ese desapego son Navarra -52,9%-, País Vasco -44,1%- y Cataluña -39,8%-. En cambio, donde más se "profesa la españolidad" es en Melilla -75%-, Madrid -39,4%-, Valencia -38,7%- y Cantabria -37,5%-.
Además, desciende el número de españoles que se sienten muy orgullosos de su nacionalidad -46,5% en 2005; 39,1% en 2013- y aumentan los que están o bien poco orgullosos -6,9% en 2005; 13,1% en 2013- o nada orgullosos -5% en 2005; 8,7% en 2013.
Los 'enemigos' exteriores
Los consultados también apuestan por reducir el presupuesto de las Fuerzas Armadas y sus efectivos, ya que consideran que en España no existen amenazas ni peligros importantes.
Finalmente, la encuesta muestra que los españoles apuntan a que la potencia que puede suponer una mayor amenaza para el país es Marruecos -14,8%-, seguido por el Reino Unido -11,4%- y Siria -8,4%-, probablemente porque la encuesta se hizo cuando el régimen de Bachar al Assad acababa de ser acusado de utilizar armas químicas.