Tal día como hoy, 19 de febrero, pero de 2012, Libertad Digital contaba en su portada lo más destacado de la marcha sindical en protesta por la reforma laboral del Gobierno de Rajoy. Los secretarios generales de CCOO y UGT encabezaron la manifestación en Madrid y explicaron que las protestas no buscaban confrontar, sino corregir el decreto de reforma laboral aprobado por el Gobierno.
Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez recalcaron que esas primeras movilizaciones eran "una expresión democrática" contra lo que consideraban una reforma laboral "impuesta" que introducía a través del nuevo contrato para emprendedores el despido libre.
Un grupo de indignados que se encontraban concentrados frente al edificio de la Bolsa de Madrid abuchearon a políticos y sindicalistas durante la marcha contra la reforma laboral. Acompañados de banderas y pancartas críticas con la reforma, lanzaron consignas contra el Gobierno y los políticos.
Así, cuando la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, se acercó a los indignados para atender a los periodistas que se encontraban en la zona. Entonces comenzaron los abucheos y gritos de "que no nos representan" y "PSOE y PP, la misma mierda es". La socialista no puedo atender a los periodistas y tuvo que abandonarles.
El acto principal terminó en la Puerta del Sol. Allí los representantes de los sindicatos leyeron distintos manifiestos. Un representante de CCOO leyó el discurso de clausura de la marcha en Madrid y concluyó con un: "¡Ahora a tomar cervezas y a vivir. Salud compañeros y compañeras!". Tras eso, todos cantaron la Internacional.
Desde el PP, María Dolores de Cospedal lanzó duros reproches a los sindicatos y dijo que "la respuesta que vimos no era mayoritaria, ni mucho menos". Pregunta por si creía que los sindicatos habían defendido correctamente a los trabajadores, aseguró que "los intereses de los parados los defiende aquél que pretende incentivar la contratación, y creo que hasta ahora los que tenían que hacerlo no lo han hecho, tampoco el Gobierno anterior". Y añadió que "los derechos de los parados los defiende quien crea una legislación laboral destinada a contratar a más gente".