Las Fuerzas Armadas tienen más de 300 militares desplegados en África

Las Fuerzas Armadas españolas están presentes en África como nunca lo habían estado desde la llegada de la democracia a nuestro país. El auge del yihadismo internacional y los problemas que a la propia Europa están causando la inestabilidad de algunos países del continente negro ha provocado que en los últimos años se hayan multiplicado las misiones en esta área.

En la actualidad, más de 300 militares españoles, miembros del Ejército de Tierra, Ejército del Aire y la Armada, están desplegados en seis países africanos. A ellos, habría que añadir además la presencia de agentes de la Guardia Civil, una institución policial de naturaleza militar que también aporta su granito de arena a las misiones exteriores.

Somalia

Está considerado internacionalmente como un estado fallido desde hace algo más de veinticinco años, cuando las tropas internacionales pusieron pies en polvorosa tras una misión de las Naciones Unidos para poner fin a la guerra civil entre señores de la guerra que vivía este país del Cuerno de África.

En su capital, Mogadiscio, se ha instalado desde hace unos meses la misión europea EUTM Somalia, cuyo objetivo es adiestrar a unas Fuerzas Armadas locales capaces de mantener la seguridad, en la capital al menos, para que el nuevo gobierno del país pueda ir consolidándose y dando algo de estabilidad al país.

Pese a que la misión lleva cuatro años en marcha, hasta ahora la misma estaba centralizada en Kampala (Uganda), ya que la propia Somalia no garantizaba ni la seguridad de los instructores militares europeos ni la de los batallones de reclutas somalíes. España cuenta son catorce militares en esta misión, de los que ocho son instructores y el resto están destinados en el Cuartel General de la misión.

Yibuti

Este pequeño y estable país del Cuerno de África es la base principal de la lucha contra la piratería en el Océano Índico y de las misiones que se esfuerzan por enderezar la situación política de Somalia. Dos misiones de la Unión Europea y otra de la OTAN tiene su base principal en Yibuti.

La Operación Atlanta de la Unión Europea tiene como objetivo acabar con la piratería en el Golfo de Adén y las costas de Somalia y proteger el tráfico de buques del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidos. Las Fuerzas Armadas españolas aportan a la misión un Buque de Acción Marítima (BAM), con un equipo de infantes de Marina a bordo, y un destacamento aéreo, denominado Orión, del que forman parte una cincuentena de militares del Ejército del Aire y un avión de vigilancia marítima Orino P3.

La otra misión europea se denomina EUCAP-Nestor. De carácter civil, su objetivo es la asistencia, formación y asesoramiento a las autoridades de la región en materia judicial, policial y marítima con la finalidad de mejorar la seguridad marítima en la región del Cuerno de África

La tercera misión es Ocean Shield, de la OTAN. Está compuesta por dos agrupaciones navales permanentes que rotan de manera alternativa en la zona. Busca proteger el tráfico marítimo mercante en la zona y actuar como fuerza de escolta y disuasión para impedir los ataques piratas. La Fuerzas Armadas españolas aportan de manera habitual una fragata F-100, que en la actualidad (F-105 Cristóbal Colón) se encuentra al mando de la misión.

República Centroafricana

Este país africano es uno de los que más preocupa en la actualidad a la comunidad internacional. Milicias cristianas e islamistas se enfrentan por todo el país –aunque también hay enfrentamientos entre milicias de la misma religión– con armas automáticas y machetes dejando miles de muertos a su paso. Los datos de la ONU dicen que casi un cuarto de la población ha abandonado sus casas porque no las consideran seguras.

Desde hace unos meses un contingente francés de 2.000 militares intenta interponer la paz en el país, aunque en la actualidad las fuerzas internacionales ni siquiera controlan todos los distritos de Bangui, la capital. De hecho, los combates son continuos cada noche en el área no habitada que separa los distritos 3 (de mayoría musulmana) y 5 (de mayoría cristiana) de la ciudad.

En ese campo de batalla hay destinados algo más de un centenar de militares españoles. El grueso del contingente los componen militares del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) del Ejército de Tierra, conocidos popularmente como Boinas Verdes, y que precisamente lideran las operaciones especiales de la misión europea en el país: Eufor RCA. Junto a ellos, un pequeño grupo de agentes de los Grupos de Acción Rápida (GAR) de la Guardia Civil, cuya misión principal, en coordinación con la Gendarmería Nacional francesa, es garantizar la seguridad en los distritos 3 y 5 de Bangui.

Gabón

La estabilidad política de la República de Gabón, su proximidad a la República Centroafricana –uno de los países del continente que más preocupa a las países occidentales, debido a su situación de guerra civil no declarada– y la presencia de una base aérea del Ejército francés, ha convertido a esta república del África subsahariana en un punto estratégico en la región.

En su capital, Libreville, se encuentra el Destacamento Mamba, conformado por 50 militares del Ejército del Aire y un avión de transporte C-130 Hércules. La misión del contingente español es la de prestar apoyo a la misión internacional encabezada por Francia que busca imponer la estabilidad política en la República Centroafricana, antes de que el control del país sea entregado a un contingente de soldados africanos aportados por la Unión Africana.

Mali

Hace un año y medio, una coalición de yihadistas e independentistas Toureg puso en jaque al Gobierno de Mali. El avance de esta extraña alianza llegó hasta las puertas de Bamako, la capital del país, situada en el extremo sur del país, después de que hubiesen tomado el control prácticamente todo el territorio desde sus guaridas del norte, en pleno desierto del Sahel.

La rápida intervención de las tropas de combate francesas, en la denominada Operación Serval, ha permitido al Gobierno de Bamako volver a controlar gran parte del país, aunque los enfrentamientos entre los militares galos y un contingente multinacional enviado más tarde por la Unión Africana todavía son casi diarios, pues los yihadistas todavía se mantienen fuerte en la misma zona desde la que habían iniciado su ofensiva: las montañas del norte y el desierto.

Las Fuerzas Armadas españolas tienen desplegados en este país a algo más de un centenar de militares. Un número inferior a la decena en la capital maliense, en el Cuartel General de la misión europea EUTM Mali. El resto, en la ciudad de Koulikoro, al norte de la capital, pero todavía en la mitad sur del país, donde adiestran a nuevos batallones del Ejército de Mali, que según acaban la instrucción, son enviados al norte del país a entrar en combate con los extremistas islámicos.

Senegal

Este país africano es uno de los más estables políticamente del continente africano y un auténtico remanso de paz en una zona de África Occidental en el que tanto la inestabilidad creada por el yihadismo como el aumento de la piratería en el Golfo de Guinea preocupa seriamente a la comunidad internacional. En su capital, Dakar, se encuentra una de las bases militares más grandes que Francia tiene fuera de su territorio soberano.

En la base aérea de esas instalaciones militares se encuentra el Destacamento Marfil. Este contingente español, compuesto por una cincuentena de militares del Ejército del Aire y un avión de transporte Cesna CN-295, tiene como misión dar apoyo aéreo a la Operación Serval, transportando tropas y material bélico a Mali desde buena parte del África central. Este contingente trabajo en un área de África comparable a la distancia que separa la costa atlántica de Portugal con la Península de Crimea.