La proclamación como nuevo Rey de España de Felipe de Borbón ha traído consigo la elevación del nivel de alerta antiterrorista en nuestro país. Este jueves, el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez Vázquez, ha cursado una instrucción dirigida a las Direcciones Generales de la Policía y de la Guardia Civil y a los Delegados del Gobierno en las que les avisa de este cambio de alerta, que pasa del nivel 2 al nivel 3, quedándose a sólo uno del mayor de los existentes, el nivel 4, según el Plan de Prevención y Protección Antiterrorista aprobado en 2005.
Este nivel 3 supone la activación de las Unidades especiales de intervención y reserva de las Fuerzas de Seguridad del Estado y su participación en la vigilancia de los lugares de afluencia masiva de personas y en la protección de infraestructuras críticas, cometidos que hasta el nivel 2 desarrollan exclusivamente las unidades de seguridad ciudadana. Del mismo modo, en este nivel se contempla la posibilidad de restringir el acceso a infraestructuras críticas que se vean amenazadas.
La instrucción establece también cómo debe realizarse la coordinación de la Policía Nacional y la Guardia Civil con las policías locales y autonómicas y se recogen las medidas que se van a tomar para reforzar la actuación de las Fuerzas de Seguridad en tres ámbitos geográficos: la ciudad de Madrid, la Comunidad de Madrid y provincias limítrofes, y el resto de España.
Entre estas medidas se encuentran la planificación de controles de tráfico en los accesos a la capital de España, y la activación de dispositivos especiales para la protección del Congreso de los Diputados, del Palacio Real, y de los itinerarios de desplazamiento de la comitiva real y del resto de autoridades asistentes a los actos.
Asimismo, la instrucción contempla el establecimiento de un sistema de restricción y control del espacio aéreo durante los actos de proclamación de Don Felipe de Borbón como nuevo Rey, y para ello se contará con la colaboración de las Fuerzas Armadas. Igualmente, se establecerá un dispositivo de protección específico sobre las infraestructuras críticas encargadas de asegurar el normal funcionamiento de las instalaciones donde se desarrollarán los actos de proclamación y de las que garantizan el funcionamiento de los servicios esenciales.
La coordinación de todo el dispositivo de seguridad especial se realizará desde el Centro de Mando (CEMAN), que estará físicamente en la sede de la Secretaría de Estado de Seguridad, en el Ministerio del Interior, y que incluye una Mesa de Inteligencia, encargada de centralizar y analizar toda la información disponible, y para la que la Policía Nacional, la Guardia Civil y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ya están preparando los primeros informes.