La portavoz de UPyD, Rosa Díez, ha tomado la palabra en el Congreso para defender su voto a favor de la ley de abdicación. Tras matizar que "ya habrá tiempo" de hablar sobre cómo "los temas se han dejado pudrir" hasta que "no queda otro remedio", Díez ha subrayado que lo que se vota este miércoles es "Constitución sí o no". "Hoy es el día para cumplir y hacer cumplir la Constitución. Hay quien pretende que esto abra una crisis constitucional" pero "la respuesta debe ser que las instituciones funcionen con normalidad".
Desde la tribuna, Díez ha contestado a quienes exigen república subrayando que el debate "no tiene sentido" en "términos de democracia". Y, dirigiéndose a IU, les ha preguntado si Cuba o Irán, "por el hecho de ser repúblicas", garantizan los derechos mejor que monarquías como la británica o la sueca.
La diputada ha dicho que lo importante "es la calidad del sistema", no la forma del sistema en sí, y ha citado la importancia de "acabar con reinos de taifas", recuperar la "unidad educativa" y tener un "laicismo inapelable". "Me temo que muchos que se proclaman republicanos no compartirían estas premisas, porque son los mismos que propugnan la partición del Estado de Derecho", ha subrayado, algo "tan arcaico como creer en el derecho divino de los monarcas".
Díez ha añadido que el referéndum que plantea la izquierda "es ilegal" y que la "forma del Estado no garantiza nada", lo "importante es el buen funcionamiento del Estado". Y en este punto, se ha dirigido al futuro Rey, Felipe VI: "Es el momento de colaborar y apoyar. Pero no es un cheque en blanco. Es el tiempo de las reformas, no puede haber más ocurrencias ni cesiones gratuitas" ni "paños calientes". La diputada ha pedido que Felipe VI "esté a nuestro lado, al lado de la sociedad en el proceso de regeneración democrática", y ha destacado que "le corresponde estar a la altura" y "encarnar las nuevas aspiraciones de los españoles".
En este sentido, Rosa Díez ha señalado que la sociedad desea una "democracia de más calidad". "Esperamos que el futuro rey sea garante de la unidad de la nación española y que sea un ejemplo de una democracia de calidad", ha dicho antes de citar también la "separación de poderes" y la "libertad" e igualdad de todos los ciudadanos. También se ha referido al funcionamiento de la propia institución, en alusión al caso Nóos, pidiendo un monarca que entienda sus funciones "como obligaciones" y no como privilegios, sin "corruptelas" para él ni para otros "miembros de la corte".