El consejero de Empresa y Empleo, Felip Puig, ha dicho este lunes que "no le parece correcto sacar un argumento de debate político" sobre el proceso catalán respecto a la agresión de ayer al líder socialista, Pere Navarro, ya que "no hay nadie que pueda tener, en estos momentos, ningún argumento que lo vincule".
Mientras asistía a la comunión de un familiar en Tarrasa, localidad de la que ha sido alcalde durante muchos años, Navarro fue agredido por una mujer de unos 50 años, que le propinó un puñetazo en la cara al grito de "grandísimo hijo de puta", según ha relatado el dirigente socialista.
En declaraciones esta mañana en Rac1, después de expresar "la condena más absoluta a todo acto de violencia a cualquier ciudadano", Puig ha considerado que "sería perjudicial para el clima de convivencia generalizar y sacar conclusiones de unas intenciones y motivaciones que no se conocen".
Respecto a las palabras de Pere Navarro, que ha vinculado la agresión al "clima de crispación" generado por el debate separatista, el consejero ha asegurado que "no hay ningún clima de crispación" y considera que en Cataluña se está dando "un ejemplo de civismo increíble" y que en otros países "eso sorprende".
Además, ha asegurado que él también ha recibido "improperios" pero que, en ningún momento, les ha atribuido "intencionalidad política".