Tal día como hoy, 14 de abril, pero de 2005, Libertad Digital contaba en su portada el recuerdo de Zapatero en el aniversario de la proclamación de la II República. En una entrevista, el entonces presidente del Gobierno dijo que España tiene "unos valores democráticos que nos hacen evocar que aquel proyecto que entonces no pudo ser, hoy es".
Preguntado sobre si el PSOE seguía siendo republicano, Zapatero dijo que es "constitucional, que tienen un compromiso con la Constitución" y que ésta "establece que la Jefatura del Estado es monárquica", pero añadió que "tenemos un Rey bastante republicano". Más tarde explicó esta sorprendente afirmación: "Para mí un republicano es un defensor de las instituciones, de los valores democráticos, quien es defensor de la vida pública, quien respeta los principios de una ciudadanía libre, y en ese sentido estamos muy tranquilos y muy a gusto".
Gaspar Llamazares calificó de "paradoja" las declaraciones de Zapatero, ya que, a su juicio, "o hay Monarquía o República" y dijo que "IU es partidaria de la forma de Estado republicana y la representa un presidente de la República, no un monarca". Mariano Rajoy, por su parte, dijo que las afirmaciones de José Luis Rodríguez Zapatero constituían un "alarde intelectual más" del jefe del Ejecutivo.
Años más tarde y tras los escándalos en los que se ha visto envuelta la monarquía, la Juventudes Socialistas de España respaldaron a la federación de Madrid que anunció que se iba a unir a favor de la instauración de la III República. El secretario general de las JSE recordó que su organización siempre había apoyado esas convocatorias, pero en la de 2013 lo hicieron "con más fuerza aún" después de las informaciones sobre la imputación de los duques de Palma, las actividades de la princesa Corina o la cacería de Botsuana en la que participó el Rey.
De hecho, dijo que la imputación de la infanta Cristina en el caso Nóos "supone un paso más en el descrédito de la Monarquía como forma para la Jefatura del Estado". En un comunicado, las Juventudes Socialistas señalaron que "los últimos acontecimientos demuestran que la monarquía tuvo sentido en un contexto histórico determinado, que era la transición a la democracia, pero hoy en día no encuentra la menor justificación desde el punto de vista racional ni mucho menos por el comportamiento de los miembros de la Casa Real".
El líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, propuso "hablar tranquilamente para buscar consensos", aunque advirtió a los militantes republicanos del PSOE de que su partido iba a mantener el pacto que hizo hace 35 años para que España siguiera siendo una monarquía parlamentaria.