El expresidente del Gobierno y presidente de FAES, José María Aznar, ha clausurado este martes en Sao Paulo el seminario internacional "Respuestas modernas y democráticas a las demandas sociales" en el que ha valorado la situación de Venezuela, de Crimea y ha analizado el desafío creciente del populismo en Eupopa.
Durante su intervención, Aznar ha dedicado parte de su discurso a analizar la situación en la que de encuentra Venezuela. El expresidente español se ha preguntado "¿qué tiene que pasar para que la comunidad internacional reaccione ante la situación en Venezuela?". Tras ello ha manifestado que "la cuestión es preguntarnos cuántos muertos más hacen falta, cuánta gente en prisión, cuántas libertades eliminadas, cuántas faltas de respeto al Estado de Derecho; cómo se puede seguir saqueando, empobreciendo y destruyendo el país". Jose María Aznar ha explicado que supone que en algún momento "los Gobiernos de Latinoamérica y las organizaciones de centro-derecha en el mundo se lo deben preguntar".
Por su parte, ha afirmado que "yo siento la obligación moral de expresar mi respaldo a los defensores de la democracia en Venezuela, igual que durante muchos años he defendido a los demócratas en Cuba".
Crimea
El expresidente del Gobierno también ha tenido palabras para la cuestión de Crimea, sobre la que ha dicho que, por parte de Rusia, "es una forma muy clara de entender el liderazgo y de intentar restablecer una antigua forma de país no respetando las reglas del juego". En este sentido, ha valorado que "en Rusia también se celebran elecciones, lo cual no quiere decir que sea una democracia. Es un populismo autoritario".
Jose María Aznar ha afirmado durante la conferencia que lo que le preocupa "es que Occidente sepa lo que tiene que hacer. El que ha incorporado Crimea a la Federación Rusa sabe lo que hace. Lo ha hecho sin respetar las reglas. Me gustaría pensar que Europa y Estados Unidos van a reflexionar seriamente sobre esta cuestión, ya que personas en muchas partes de Europa se van a sentir amenazadas", ha afirmado.
También en relación a Europa, Aznar ha analizado el desafío creciente del populismo, y ha alertado de que "partidos extremos pueden tener triunfos importantes en las próximas elecciones al Parlamento Europeo", lo que ha considerado "un riesgo muy serio" y "una expresión de falta de ideas claras y de liderazgos".
Empleo
Durante la clausura del seminario, en forma de coloquio con el presidente del PSD, Gilberto Kassab, Aznar ha señalado también que "la principal demanda social es tener oportunidades y tener oportunidades es fundamentalmente tener un empleo". En este sentido, ha subrayado que "la tarea de los Gobiernos no es crear trabajo, sino establecer un marco de oportunidades para que las empresas puedan crear empleo". "Si existe esto empiezan a surgir otras demandas sociales", ha afirmado el presidente de FAES, que ha considerado prioritarias "las de las nuevas clases medias, que exigen mayor transparencia".
En el ámbito económico, ha afirmado que "es necesaria una voluntad política reformista fuerte" y que "hay reglas que funcionan en todas partes, como la flexibilidad, la competitividad y la productividad". Asimismo, ha señalado que "los países deben ser económicamente estables; hacer buenas reformas laborales para que pueda haber empleo, y reformas fiscales para que las clases medias no se vean asfixiadas". "Hace falta hacer un Estado del Bienestar viable, ajustado a las condiciones sociales, económicas y demográficas de los países", ha dicho además.
Mejoras democráticas
El seminario "Respuestas modernas y democráticas a las demandas sociales", en el que han participado representantes de España, Portugal, Brasil, Argentina, México, Colombia, Perú, Ecuador, Venezuela, Chile y Uruguay, fue inaugurado este lunes 17 por el secretario general de FAES, Javier Zarzalejos, y el presidente de Espacio Democrático y ministro de Pymes de Brasil, Guilherme Afif.
Las sesiones han analizado las reformas políticas y económicas necesarias para mejorar la calidad democrática, garantizar la prosperidad, consolidar las clases medias y fortalecer los vínculos entre ambas orillas del Atlántico.