El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, confirmó el pasado lunes que entre Marruecos y Mauritania hay una cifra de entre 30.000 y 40.000 inmigrantes irregulares esperando la posibilidad de alcanzar Europa a través de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Unos inmigrantes que contratan los servicios de diferentes mafias de tráfico de personas que les venden la posibilidad de vivir su sueño de entrar en Europa.
Según los datos que maneja el Ministerio del Interior, fruto de informes policiales sobre las mafias de la inmigración ilegal y la información que les facilitan diversas policías africanas tras los acuerdos de cooperación firmados en los últimos años, a los que ha tenido acceso Libertad Digital, estos grupos de trata de humanos ofrecen diferentes paquetes a los inmigrantes que quieren entrar ilegalmente en nuestro país.
De este modo, para entrar en la Península Ibérica, las mafias están ofreciendo paquetes que van desde los 600 euros a los 6.000 euros. La opción más barata es hacerlo a través de embarcaciones, normalmente, cayucos. Para este tipo de intento existen una precios que van entre 600 y 800 euros para los ciudadanos marroquíes, 1.000 euros para los argelinos, y entre 1.200 y 1.500 euros para los subsaharianos.
Si en vez de un cayuco, los inmigrantes optan por un viaje en una embarcación rápida, acortando drásticamente el tiempo de llegada a las costas de la península y las posibilidades de que la embarcación sea detectada por la Guardia Civil, el precio sube hasta los 3.000 euros. La opción más cara cuesta entre 4.000 y 6.000 euros, y se entraría en España por avión con un pasaporte falsificado.
La implantación del sistema SIVE (Sistema Integrado de Vigilancia Exterior), que permite detectar a larga distancia las embarcaciones que se aproximen a nuestro litoral e identificar a sus tripulantes, ha provocado que la entrada por vía marítima a la Península Ibérica se haya reducido drásticamente, lo que hace que la presión migratoria se haya trasladado a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
Para entrar ilegalmente en las dos ciudades autónomas, las mafias ofrecen varias opciones, siempre sin incluir el precio del viaje desde el país de origen hasta los asentamientos cercanos a las vallas fronterizas, igual que sucede en las ofertas anteriormente mencionada para llegar a la península. Así, para entrar a nado en cualquiera de las ciudades, ofrecen la posibilidad de adquirir un flotador por 25 euros o un chaleco salvavidas por 45 euros.
Cabe destacar que varios de los inmigrantes que intentaron entrar en Ceuta el pasado día 6 de febrero por el espigón de El Tarajal y que utilizaron estos métodos terminando muriendo ahogados. Los flotadores eran una especie de garrafas vacías, que no tardaron en hundirme en el mar. Los salvavidas o se desinflaban o se separaban del cuerpo de sus portadores.
Para estos dos ciudades también ofrecen la posibilidad de entrar usando una embarcación, lo que tiene un coste de 1.000 euros. Pasar en el interior de un vehículo (en el maletero, escondido en el salpicadero o junto al tubo de escape...) por los pasos fronterizos cuesta entre 3.000 y 4.000 euros, mientras que documentación falsa para entrar por los pasos fronterizos tiene un coste de entre 5.000 y 6.000 euros.