En Andalucía, cerca de 40.000 alumnos han visto rechazada su solicitud para acceder a una plaza en los diferentes ciclos de la Formación Profesional para el presente curso. Han sido 39.773 los solicitantes que se han quedado fuera de la FP, según los datos oficiales facilitados al Parlamento por la Consejería de Educación a raíz de una pregunta del Partido Popular, siendo la provincia de Sevilla, con 11.251 solicitudes rechazadas, la que registra un nivel más elevado de expectativas frustradas por la falta de plazas.
Entre centros públicos y concertados andaluces han admitido a un total de 56.010 alumnos de nuevo ingreso. Esto es, la oferta apenas ha cubierto a un 58,5 por ciento de la demanda. O dicho de otra forma, que el 41,5 de los solicitantes se ha quedado fuera del sistema, que cuenta con 112.415 alumnos en sus ciclos formativos.
El Mundo subraya que la razón a la enorme brecha existente entre la oferta y la demanda se debe, por un lado, a un incremento notable de las solicitudes, en línea con lo que venía ocurriendo en los últimos años, pero también a una falta de capacidad de la Consejería de Educación para satisfacer esas nuevas necesidades de formación que, a priori, se consideran positivas para el conjunto de la sociedad andaluza. En definitiva, sea por imprevisión o sea por los recortes en la Educación, parece objetivo que el sistema educativo andaluz no ha sabido dar respuesta a esa demanda social.
Con anomalías, ya que la avalancha de la demanda era previsible, la oferta de módulos de Formación Profesional apenas se ha visto incrementada en 13 nuevos ciclos de grado medio y 12 de grado superior. En paralelo, sin embargo, se han extinguido 9 ciclos, 7 de grado medio y 2 de grado superior, según consta en la orden de 15 de mayo de 2013 por la que se actualiza la autorización de determinadas enseñanzas en centros docentes públicos.
Por provincias, son los centros públicos y privados de Sevilla los que han rechazado un volumen mayor de solicitudes, exactamente 11.251, 9.443 en los centros públicos y 1.808 en los privados. Le sigue la provincia de Cádiz, con 7.163 solicitudes rechazadas; y Málaga, con 6.986. Después van Granada, con 4.033; Córdoba, con 3.508; Jaén, con 2.772; Almería, con 2.201; y Huelva, con 1.841.
Todo lo anterior implica que la Junta de Andalucía desatiende, en la comunidad con más paro de España, la Formación Profesional de grado medio y superior. Contradice así su propio discurso sobre las políticas andaluzas para el fomento del empleo por parte del Gobierno andaluz, en una comunidad con más de un millón de parados y con las subvenciones para formación -fuera de los institutos y destinada a ocupados y parados- acusadas de corrupción generalizada e inmersa en investigaciones judiciales abiertas por desvío de los fondos públicos.