El Mundo relega el asunto vasco porque está muy preocupado con las cosillas del PSOE. "Rubalcaba inventa un órgano para controlar las primarias". Pedro J. se ha llevado un susto de muerte. ¿Pero no hay forma de librarse de este tío? "Es perjudicial para el PSOE", "es más problema que solución para el partido que dirige", y nada, oye. "Rubalcaba no desiste en su intención de presentarse a las primarias y ser el candidato del partido".
Federico Jiménez Losantos presenta un panorama para salir corriendo tras los últimos acontecimientos en el País Vasco. "En España convergen cuatro columnas, la del separatismo revolucionario vasco de la ETA, la del separatismo dizque moderado del PNV, la del separatismo insurreccional catalán de los boixos nois de ERC y la del separatismo falsamente dialogante de CiU. Pero siendo poderosas y temibles esas cuatro columnas la más peligrosa en la quinta columna, la que trabaja desde dentro, esa izquierda antiespañola que habla de la 'política de odio' del gobierno a las 'órdenes de los ultras de la AVT', como hace el Garzón de IU, o que, como el PSE, respalda el renovado pacto de Estella ETA-PNV". Cree Federico que "un auténtico Gobierno de España respaldado por los partidos nacionales podría defender la plaza española frente a las cuatro columnas atacantes y, en pocos años derrotarlas. Pero la derecha maricomplejines de Rajoy y la izquierda sectaria de Rubalcaba y Cayo Garzón, que actúa desde hace años como quinta columna de todos los separatismos, incluido el terrorista, son pan comido para una rebelión de chaqueteros de Armani que han encontrado, salida de la cárcel, a alguien capaz de empuñar el timón: la ETA".
El País lleva uno de esos titulares en plan acertijo. "Urkullu se ofrece a La Moncloa como garante del final de ETA". ¿Y eso qué quiere decir?, se preguntarán. A mí que me registren. El periódico hace lo imposible para justificar el cariño y apoyo que prestó el PNV a ETA y su mundo. Que si "el presidente del PNV justifica su apoyo por razones de orden público", que si "muchos militantes y simpatizantes del PNV abandonaron la movilización tras escuchar los gritos" de apoyo a ETA, que si el presidente del PNV "reflejaba en su cara la indignación por el engaño de Sortu", que mira que son malos. Marca a Rajoy cuál debe ser su reacción. "El Gobierno mantendrá el nivel de diálogo con el PNV a pesar de su aproximación a Sortu" y Rajoy "no se inmutará", a ver si se va a poner bravo. "Un nuevo frente de conflicto" se le ha abierto a Rajoy, "ya agobiado por el desafío soberanista en Cataluña y la oposición a la ley del aborto". Sí, vaya día que tenemos hoy: a mi se me rompe el boli, a ti se te muere tu padre...
ABC abre su portada con una entrevista a Arantza Quiroga, presidenta el PP vasco. "Urkullu ha cometido un grave error", dice. Se la ve contundente, a la muchacha. A José María Carrascal le da la misma mala espina que a Federico lo que hacen PSOE y e IU. "A mí no me preocupan tanto los nacionalistas, que terminarán comiéndose los unos a los otros, como sus mediadores", dice. Félix Madero se pone duro con el PNV. "Los de Urkullu se diferencian" de los etarras y cía "en que no gastan zarzillos en la orejas, y poco más". Isabel San Sebastián dice que se veía venir. "Es ETA la que dirige el proceso de secesión, no de paz, vigente en el País Vasco" y el PNV "comparte abiertamente los fines secesionistas de ETA". E Ignacio Camacho está de capa caída. "Todo se ha enredado en apenas dos semanas (...) La sensación de este brusco giro es que las cosas estaban menos maduras de lo que aparentaban (...) El error principal consiste en no entender que el proyecto político de ETA sigue vivo y nunca ha dejado de estarlo aunque la banda no mate", lamenta con amargura. "De nuevo, por desgracia tienen razón las casandras pesimistas que insisten en que, de una manera o de otra, la banda pretende sobrevivir a su propia derrota cambiando de piel". ¿Qué? ¿Acordándonos de Mayor Oreja?
La Razón no puede perder el tiempo en estas bobadas cuando Rajoy se va a reunir con Obama. "Rajoy busca en EEUU recuperar mil millones anuales de inversión", titula su portada. Marhuenda, en su línea: "Obama confía en Rajoy", titula el editorial. En páginas interiores dice que "El Gobierno responderá a la 'vía vasca' de Urkullu como a Mas: ley y estado de derecho". Pues apaga y vámonos. Eso sí, dice La Razón que "en el Gobierno han empezado a encenderse algunas luces de alarma por la posición del PNV". Pues si a Rajoy se le ha encendido una lucecita de alarma es que debe estar la cosa que arde.