La nueva secretaria general de UGT-A, Carmen Castilla, se definió en su discurso tras ser elegida como "una persona científica" y, además de recordar su trayectoria profesional y personal, afirmó: "Alguna pega me pondrán; quizá que soy rubia o que tengo 45 años y aparento 35".
Especialmente firme se mostró con la presidenta de la Junta, Susana Díaz, pidiéndole que la "firmeza y transparencia" que le exige al sindicato sea algo "bidireccional". Castilla aludió a las palabras de Díaz "que pidió el pasado miércoles firmeza y transparencia" a UGT-A, ante lo que la secretaria general de UGT-A pide a la Junta y a la propia Díaz "lealtad, firmeza y transparencia". "Esto tiene que ser bidireccional", ha aseverado.
Tras apuntar que algunos le comparan con Susana Díaz, Castilla ha apuntado que "hay una diferencia clara entre Díaz y yo, ella es secretaria general del PSOE-A y yo soy secretaria general de UGT-A".
Castilla, que se definió a sí misma como "una persona científica", prefirió en su primer discurso ante el Comité Regional hablar sin papeles "desde el corazón", y recordó que UGT "es el mayor sindicato de la historia de España", destacando también que ella será "la primera mujer que liderará UGT-A".
Tras recordar su trayectoria profesional, de más de 20 años en el SAS, en concreto en el área de medicina interna, ha criticado la acción de la derecha "más reaccionaria", que "se está cargando la Constitución por la vía de atrás, recortándonos derechos y queriendo callar a UGT, la única organización capaz de plantar cara a esos fascistas".
Así, ha aludido a medidas del Gobierno central como "la reforma laboral, la privatización del sistema sanitario, la reforma de la administración local o la Ley Orgánica de Medidas para la Calidad Educativa (Lomce)". En ese sentido, ha puesto su ejemplo personal, para apuntar que "en los años 70 la menor de ocho hermanos pudo estudiar y tener una carrera, pero ahora esa persona probablemente no podría estudiar, y esa niña lidera ahora UGT-A, fastidie a quien fastidie".
Además, ha pedido unidad a todas las uniones y federaciones, de forma que "se acabó el sector crítico, somos una sola UGT y voy a darle la mano a todos los que han estado en contra de este proceso". "Vamos a salir reforzados de este proceso pero no le vamos a dar el gusto a los que están fuera ni a la derecha más reaccionaria, vamos a ir unidos", agrega.