El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, dijo este jueves que, tras la excarcelación de 58 terroristas de ETA por la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) sobre la Doctrina Parot, ya "sólo quedan dos o tres etarras por salir de prisión", aunque en realidad quedan bastantes más por hacerlo.
En un desayuno informativo organizado por Europa Press en el Hotel Villa Magna de Madrid, explicó también que a estos terroristas de ETA en ser próximamente excarcelados se sumarán asimismo otros cinco del GRAPO y alguno del GAL y el Exército Guerrilheiro do Povo Galego Ceive (EGPGC).
"La aplicación de la sentencia ha sido desagradable para todos. Los terroristas no son soldados de un ejército victorioso, son sólo eso, terroristas", dijo, tras los que recordó que "los jueces y fiscales han sido determinantes para la derrota de ETA" y que su departamento ha puesto en marcha un grupo de psicólogos al servicio de las víctimas del terrorismo para apoyarles.
Jorge Fernández Díaz afirmó que si ETA ya "no mata o aterroriza, no es porque se hayan vuelto demócratas sino porque han sido derrotados por el Estado de Derecho" y aseguró que "la ETA que asesinó a 900 personas", que "mutiló" y "extorsionó", "ha sido derrotada y ya no volverá". "ETA ha sido derrotada comando a comando y descabeza terrorista a terrorista", prosiguió.
Dijo que la banda terrorista "empieza a ser una página amarilla en nuestra historia, una parte del relato que ya amarillea", y aseveró que debe disolverse "por las buenas o por las malas", así como entregar todo o parte de su arsenal de armas y explosivos "sin ninguna escenificación teatral" y que tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional tienen "buenos verificadores" para ese momento, por lo que no serán necesarios verificadores internacionales. "Hay que aprender a vivir sin ETA", añadió.
El ministro defendió que el Gobierno de Mariano Rajoy "ni ha negociado, ni negocia ni negociará" con los terroristas y que "tras el daño causado" en sus más de cincuenta años de actividad criminal "no han conseguido ningún rédito". "Nada debemos a los terroristas y nada daremos, ni las gracias por dejar de matar", añadió.
También tuvo palabras para Sortu, el brazo político de ETA. A ellos les dijo que "la Ley de Partidos sigue perfectamente vigente" y que si vulneran los preceptos que marcó el Tribunal Constitucional para mantener su legalización "serán perseguidos". "El contador no está a cero, deben cumplir las reglas de la democracia", les advirtió.
Jorge Fernández Díaz afirmó que la batalla que queda por librarse en la del relato histórico, algo que a su juicio quedará cerrado con la construcción en el País Vasco del Instituto de la Memoria y el Memorial de las Víctimas del Terrorismo. "El relato de la verdad lo escribiremos todos los demócratas con las víctimas", añadió.
Por último, aseguró que el Gobierno no modificará la política de dispersión penitenciaria hasta que la organización terrorista ETA se disuelva o hasta que todos los terroristas encarcelados abandonen la disciplina de la banda armada.