Justo un día después de que se hicieran públicos los resultados del informe PISA, el ministro de Educación participó en un Desayuno Informativo organizado por Nueva Economía Forum. Presentado por la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y acompañado por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sánez de Santamaría, el presidente del Congreso, Jesús Posada, o el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, José Ignacio Wert resumió los pésimos resultados obtenidos por España en las pruebas PISA y defendió su ley educativa como forma de mejora.
"Organismos internacionales vienen advirtiendo de que -en Europa en general, y en particular en España- hay un problema muy agudo, que es el de la mala transición entre la educación y el empleo", comenzó Wert su alocución ante el público congregado en el Casino de Madrid.
El ministro recalcó que "un gasto público muy elevado en educación se traduce en unos resultados en términos de empleabilidad muy pobres". Y es que ésta es una de las conclusiones fundamentales del informe PISA, al que Wert calificó como "estudio muy complejo, que hay leer con mucha atención, sin prejuicios". El titular de Educación señaló que si bien en los resultados de los alumnos españoles en Matemáticas, materia en la que se centraba en esta edición el estudio, son estables respecto a la edición 2003 (año en que estuvo centrada también en Matemáticas), estos deberían haber mejorado si tenemos en cuenta todo lo que se ha invertido. Por ello, afirmó que supone un "retroceso importante".
"Me identifico un 110% con el PP y su presidente"
José Ignacio Wert no se siente solo, ni poco respaldado por el PP. O al menos eso es lo que quiso dejar claro cuando le preguntaron si se considera un outsider del PP. "Una cosa es que no tenga el carné de militante y otra que no me identifique un 110% con el partido, con su presidente, con mis compañeros y mis dos grupos parlamentarios", manifestó.
No fue la única pregunta realizada que apuntaba a su situación o futuro político. "¿Piensa tirar la toalla?", le inquirió una periodista. A lo que Wert, permitiéndose la respuesta más distendida de todo el acto (en fondo y forma) contestó: "Me hace gracia que en un país en el que no hay mucha afición por el boxeo, quitando a David Gistau, se hable tanto de tirar la toalla. Hay mucha gente que ni siquiera sabe lo que significa". Y añadió entre risas: "Yo sólo tiro la toalla, con cierto desorden, al salir de la ducha".