El dinero entregado por la Junta desde la Agencia de Cooperación Internacional fue utilizado por UGT Andalucía en actividades singulares. El 16 de agosto de 2007, la delegación ugetista invitó a una mariscada en el restaurante costarricense La Princesa Marina al Comité de Mujeres.
El gasto se cargó a la Junta y lo justificó como "imprevistos", según la nota manuscrita de la factura arriba a la izquierda de la primera factura. A su lado, factura de 268 dólares -204 euros- de una comida el 31 de octubre de 2007 en otro local salvadoreño, el Gold Street, que anima las veladas con actuaciones musicales.
Estas son:
Según ABC, para terminar, se disfrutó de un disco-karaoke también en San José, -Costa Rica-, pagada en agosto de 2007 con la ayuda destinada a formar a sindicalistas. La factura, que recoge la contratación de un "servicio de sonido y música", fue presentada ante la Administración para justificar su actividad sindical, como revela el sello oficial de la Junta y que fue concedida en 2006 por la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para montar ocho sucursales de formación de mandos sindicales en Nicaragua, Honduras, Costa Rica, El Salvador, Panamá y República Dominicana.
La ayuda de 1,8 millones de euros, que tenía "carácter excepcional" según la Junta, era el proyecto de UGT-A "Integración y Fortalecimiento Sindical en Centroamérica y El Caribe" (Proinfos). Al parecer, según las facturas y documentos contables que exhibe ABC queda claro que además del adoctrinamiento sindical sobre las confederaciones de trabajadores de estos países y otros menesteres, el dinero se usó para otras cosas.
UGT Andalucía acabó cargó a las arcas públicas la factura de una mariscada en el restaurante La Princesa Marina ubicado en la capital costarricense, San José. El 16 de agosto de 2007, miembros de UGT-A convidaron a una cena a las responsables del Comité de Mujeres de la Coordinadora Sindical de América Central y el Caribe (Csacc), que al día siguiente participaron en un seminario subregional que versaba sobre el movimiento sindical, tal y como figura en los asientos contables de la organización.
El menú fue: dos mariscadas, pollo cocinado al estilo de la gastronomía local y bebidas como Baileys, según detalla el recibo, pagado con tarjeta y presentado después a la Junta para justificar el gasto como "imprevistos" dentro de su acción solidaria. Así consta en una nota manuscrita en la copia de la factura, que lleva el sello oficial de la Junta. El coste fue de 49.583 colones -73 euros- , una cantidad que en España se hubiera multiplicado por mucho. Recuérdese que el 21 de diciembre de 2009 la ejecutiva regional cargó a una ayuda anual para negociación colectiva una mariscada de 2.047 euros -la mitad solo en bandejas de langostinos- en un restaurante de Sevilla.
Hay otra factura de 40.000 colones emitida por Disco Fiesta Karaoke, una empresa especializada en montar espectáculos, como deja patente su lema comercial: "Lo mejor para sus fiestas". El concepto que figura en el recibo no precisa más aclaraciones: "Servicio de sonido y música". Según la documentación, el sindicato organizó una fiesta con karaoke como broche al seminario organizado en San José el 17 de agosto de 2007 que reunió a cincuenta participantes, entre líderes de la República Dominicana, de la Central Latinoamericana de Trabajadores y de la Coordinadora Sindical Andina, así como destacados miembros del Instituto Internacional de Cooperación al Desarrollo -vinculado a UGT-A-, que impulsaba los centros de formación en Centroamérica.
Además, entre los gastos imputados a la Junta aparecen tres facturas de comidas, todas del mismo día -31 de octubre de 2007-, que suman 345 euros, en el Restaurante Gold Street de la capital salvadoreña, que ofrece una selecta carta de carnes, mariscos y gallina cien por cien india. amenizadas por grupos de mariachis y conciertos de artistas nacionales como las orquestas Hermanos Flores o San Vicente.