El vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Miguel Collado, contrató el pasado mes de julio a su hija Alejandra Collado -recién licenciada en Derecho- como su secretaria particular en el órgano de gobierno de los jueces.
Este nombramiento fue aprobado por el presidente Gonzalo Moliner y cuenta con una remuneración mensual de 2.000 euros. Esta contratación no supone ninguna irregularidad ya que el cargo de secretaria de un vocal es un "puesto de libre designación".
Este diario se ha puesto en contacto con Collado quien ha explicado que la colocación de su hija fue fruto de no haber encontrado una "persona de confianza" para la secretaría después de que su antigua titular abandonar el cargo el pasado mes de junio para irse a trabajar al Tribunal Constitucional.
El vocal designado a propuesta del PP señala que al tener que cesar el actual CGPJ en septiembre tuvo múltiples dificultades para encontrar a una persona de confianza para ocupar el puesto para "unas pocas semanas". Asimismo, el vocal subraya que "adoptó esta situación" porque era algo "absolutamente provisional".
Primeramente, Miguel Collado compartió durante un mes y medio secretaria con su colega, el vocal Manuel Almenar. Paralelamente, el miembro del Consejo trató de que una de las cuatro secretarias que tiene Moliner se fuera a trabajar con él, pero ninguna de ellas quiso hacerlo.
Diversas fuentes del CGPJ consultadas por este medio señalan que, si bien era público y notorio que Alejandra Collado estaba trabajando con su padre, se desconocía que dicho cargo estaba siendo remunerado.
Asimismo, existe cierto malestar porque esta información se haya filtrado por un miembro del órgano de gobierno de los jueces a un medio de comunicación ya que hay varios testigos que conocían que el vocal buscaba nueva secretaria. Esta maniobra se ha considerado por varios vocales como una "deslealtad" hacia Collado, quien asegura estar "muy disgustado" por la repercusión de la noticia.