Claves y cifras de la Diada final

– El nacionalismo catalán pretende hacer la mayor exhibición de fuerza de su historia. El año pasado congregó a casi seiscientas mil personas en la manifestación de Barcelona. La Generalidad elevó la participación hasta el millón y medio en el que coincidieron los titulares de casi todos los medios catalanes. En esta ocasión, se estima una participación similar. A una semana de la Diada ya había casi cuatrocientos mil inscritos en la cadena independentista, cuya organización cuenta con treinta mil voluntarios.

– La Administración autonómica pone a disposición de los organizadores todos los medios disponibles. 2.465 mossos d'Esquadra coordinarán el ingente despliegue humano desde El Pertús a Alcanar, más de 400 kilómetros. La Generalidad prohibe circular por casi toda Barcelona a partir de las cuatro de la tarde, aunque las restricciones comienzan a las dos y media. Arterias de comunicación como la N-II y la N-340 permanecerán cortadas durante más de dos horas. Queda suspendido también el transporte público de superficie en la capital catalana durante la celebración de la cadena.

– Las facilidades han sido tantas para la cadena independentista como impedimentos se han puesto a los miembros del Movimiento 12-O, quienes finalmente han desistido de celebrar la convocatoria de Sagrada Familia, que pretendían rodear. La recomendación de la consejería de Interior sobre las dificultades para garantizar la seguridad en ese punto si coincidían ambas cadenas fue entendida casi a la primera.

– El apoyo administrativo no sólo consiste en las subvenciones a los grupos que organizan estas muestras de fuerza en la calle. Además de la fuerte presencia institucional en la cadena, los medios controlados por la Generalidad se han volcado con la "via catalana" en las vísperas y se disponen a dar el do de pecho a partir de las 17:14, hora en la que comienza oficialmente el despliegue. TV3, recién salida de un expediente de regulación de empleo, ha contratado tres helicópteros para cubrir un acontecimiento que se tacha de histórico desde el momento mismo de su concepción. Además de los medios públicos, los organizadores han contado con el apoyo del sistema de medios dependiente de las subvenciones, con lo que la mancha mediática a favor de la cadena y de la consulta es prácticamente total.

– 17:14. Los números fetiche del nacionalismo. A esa hora empieza la manifestación, a esa hora sonarán las campanas de las iglesias y 17 metros y 14 centímetros es la altura del mástil en el que ondea la señera del "recuperado" Mercado del Borne, cuyas ruinas, afirman, son el efecto de la destrucción borbónica de hace trescientos años.

– Carme Forcadell, uno de los rostros visibles de los organizadores, se deshace en elogios hacia Artur Mas. En una entrevista en un diario independentista afirma que lo ve capaz de proclamar la independencia de forma unilateral. También ha prometido que ésta será la última gran movilización popular soberanista, puesto que a partir de ahora les tocará "hacer vía" a los políticos, según la estrategia soberanista.

– Pese a que entre los supuestos acuerdos de Moncloa figura el que Mas iba a rebajar el tono, no ha dejado de animar a los ciudadanos a sumarse a la exhibición independentista, de la que ha llegado a decir que será más importante que el discurso del "I have a dream" de Martin Luther King. El tono de las declaraciones del presidente autonómico está muy influido también por el lenguaje bélico hilvanado en torno a los mitos de 1714. Lejos de aplacar tensiones, sus discursos y declaraciones fijan la independencia como única salida a la situación.

– Haya una consulta ilegal el año que viene o unas elecciones plebiscitarias en 2016, CiU y ERC no desaprovechan ni un segundo para sumar adeptos a la causa independentista. Tanto en una formación como en otra se sugiere que la aparente renuncia de Mas a convocar un referéndum es una maniobra táctica para ganar tiempo, reducir el margen que ahora mismo le saca ERC, y consolidar la mayoría independentista.

– La situación financiera de la administración autonómica es catastrófica, con una deuda aproximada de 65.000 millones de euros. En dos meses vencen los bonos patrióticos, se funciona con unos presupuestos prorrogados, el paro, como en el resto de España, no remite y se incumplen todos los objetivos económicos. Los recortes se han llevado por delante servicios y ayudas, salvo las relativas a la expansión del independentismo.

– Entre las ventajas que se citan en CiU del "nuevo clima" de diálogo con Madrid figura el auxilio económico a la Generalidad y el aplacamiento del empresariado catalán, que salvo contadas excepciones, mantiene sus discrepancias en privado. Sólo hablan quienes apoyan las tesis soberanistas.

– En este contexto, dirigentes como Alicia Sánchez Camacho o Albert Rivera subrayan las crecientes dificultades para ejercer la política en Cataluña. Ni el PP ni Ciutadans asistirán a los actos institucionales de la Diada, dados los abucheos e insultos de ediciones anteriores. La dirigente popular ha llegado a decir que no sabe si durante la Diada podrá salir de casa, dadas, entre otras cosas, las restricciones viarias. El obispo de Solsona ha sido abroncado en la calle por la carta en la que pedía a los párrocos que se mantuvieran neutrales y no hicieran sonar las campanas y al líder del PSC, Pere Navarro, contrario a la manifestación independentista, le han asaeteado a preguntas sobre su padre, exhibido por los medios nacionalistas al trascender que iría a la cadena.