La nueva presidenta de Andalucía, la socialista Susana Díaz, asume un PSOE estancado e incluso en ligero retroceso con respecto al que perdió las pasadas elecciones autonómicas. Según una encuesta realizada a 200 personas por La Razón, el PSOE-A superaría a los populares en 2,9 puntos y se convertiría en el partido más votado con 1.203.000 sufragios. Por su parte, IU agrandaría su espacio electoral y UPyD podría conseguir un escaño.
El PSOE se dejaría 320.000 votos con respecto a hace 18 meses. Bajaría 3,7 puntos porcentuales -del 39,5% al 35,8- y su representación parlamentaria podría verse mermada en 2 diputados, al pasar de 47 a 45/47 escaños. La Cámara andaluza cuenta con 109 diputados por lo que estaría muy lejos de la mayoría absoluta, fijada en 55. De nuevo tendría que reeditar el pacto con IU.
El PP de Zoido retrocedería 7,8 puntos: pasaría del 40,7% al 32,9% y su Grupo parlamentario se reduce en 5/7 escaños, pasando de los 50 actuales a 43/45. Los populares, que en las autonómicas obtuvieron 1.567.000 votos, recibirían, según La Razón, el apoyo de 1.105.000 voantes.
IU podría sumar más de cien mil apoyos hasta situarse en los 19 escaños, siete más de los que tiene en la actualidad. Y, por primera vez, UPyD entraría en el Parlamento andaluz con un escaño, mientras que la abstención subiría 7,8 puntos. La participación sería la más baja de la historia: poco más del 50 por ciento (52,8).