El falseamiento de facturas en UGT se hizo por orden de su dirección
Desmienten la versión de los dirigentes de que se trató de "errores de contabilidad".
Tras las publicaciones iniciadas por Libertad Digital sobre el sistemático falseamiento de facturas con el fin de cargar como subvenciones lo que eran gastos generales o corrientes, UGT negó que existiera y que serían errores del personal. Ahora, los trabajadores de UGT-A ponen en entredicho la coartada del sindicato asegurando que ellos no son responsables de las filtraciones internas y que las facturas falsas no son errores de contabilidad sino que fueron los dirigentes de UGT los que ordenaron que se hiciera.
La Sección Sindical Regional de UGT han desmontado las afirmaciones del secretario general del sindicato, Francisco Fernández Sevilla, sobre la supuesta malversación de fondos públicos llevada a cabo por UGT-A, mediante la falsificación de facturas. Fernández Sevilla achacó a "un error" de los empleados del sindicato, pero la Sección Sindical ha dejado claro que "ningún trabajador ha podido cometer errores de esa naturaleza al imputar gastos ordinarios del sindicato a programas finalistas" sin tener una orden expresa de "la Comisión Ejecutiva Regional".
Tras las revelaciones de Libertad Digital desde junio de este año, a las que se sumó El Mundo después, el secretario general de UGT-A atribuyó la información sobre las facturas irregulares a una filtración por parte de los afectados por los despidos que llevó a cabo el sindicato en 2012. Sin embargo, según los empleados, esto no es posible, ya que "ningún trabajador puede filtrar nada", pues el acceso a dicha información les es "denegada por el propio programa de contabilidad".
Los empleados subrayan que, si ya les es imposible acceder a las facturas, como afirma Fernández Sevilla, "muchísimo menos pueden hacerlo a los correos electrónicos personales corporativos", en referencia a los publicados por Libertad Digital y El Mundo en el que se daban instrucciones a las empresas publicitarias o a propietarios de restaurantes para falsear las facturas.
La financiación irregular de UGT-A revelada estas últimas semanas abarca desde el coste del congreso ordinario de UGT consignado a subvenciones de empleo a la cena en la Feria de Abril, pagada con dinero recibido de la Junta, sin olvidar el coste de los utensilios de las elecciones sindicales, desde bandoleras a linternas, todo ello pagado por la Junta de Andalucía como subvenciones.
Los trabajadores de UGT-A afirman en su nota informativa que, una vez puesta en marcha "la actuación judicial", hay que esperar para ver "si la información facilitada por El Mundo" es motivo de "causa penal y de imputación por parte de los tribunales de justicia".
Esta es la nota de la Sección Sindical:
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