España gasta en sus estudiantes una cantidad superior a la media del resto de los países ricos. Sin embargo, consigue resultados mucho peores. Ésta es principal conclusión del estudio de la OCDE Panorama de la Educación 2013 que este martes se ha presentado en Madrid.
Así, según los datos de dicho informe, en 2010 el gasto medio por alumno (en paridad de poder adquisitivo) entre primaria, secundaria y terciaria alcanzó en España los 9.608 dólares. Mientras, la media de la OCDE (que engloba a las 34 economías más avanzadas del mismo) se quedaba en los 8.382 dólares, un 15% menos.
Sin embargo, este nivel de financiación superior no tiene un reflejo directo en los resultados, ni desde el punto de vista académico ni por las posibilidades que ofrece a sus estudiantes. Por eso, España tiene uno de los mayores porcentajes de ni-nis (jóvenes de menos de 30 años que ni estudian ni trabajan) de los países objeto de estudio. Por ejemplo, entre los 25 y los 29 años, una edad relativamente avanzada, el 30% de los españoles no hace nada, un porcentaje que cae al 20% en la media de la OCDE y al 10% en países como Holanda o Suecia.
También los datos de paro reflejan este fracaso. La media de la OCDE muestra un paro del 5% para los licenciados universitarios, del 7% para los que tienen educación secundaria superior (FP o bachillerato) y un 13% para los que tienen el nivel básico. Mientras, en España esas cifras suben (y mucho) hasta el 12%, 19% y 26% respectivamente.
Además, España tiene un problema con la formación de su población adulta. Así, un 46% sólo tiene la titulación básica, un 22% tiene secundaria superior y un 31,6% estudios superiores. Mientras, en la OCDE los porcentajes son un 25% sólo la básica (primaria o secundaria obligatoria), un 44% la secundaria superior y un 31% de universitarios.
Como puede verse, el gran desequilibrio llega en lo que hace referencia al nivel intermedio (FP o bachillerato). Mientras en otros países es la titulación más común, entre otras cosas porque ofrece numerosas salidas laborales, en España, incluso a pesar del avance en los últimos años, sigue siendo el pariente pobre del sistema educativo.
Desde el punto de vista de los recursos del sistema, el informe desmonta otros mitos. Así, el número de alumnos por aula es inferior en España respecto a los demás países: 8,9 en España, frente a 13,3 en la OCDE y 11,2 en la UE-21 (los países comunitarios dentro de la OCDE). Y lo mismo ocurre en cuanto al salario de los maestros. En paridad de poder adquisitivo, la retribución inicial media de los maestros en educación primaria es de 35.881 dólares; en la UE-21 es de 29.123 euros. A los quince años de carrera, estos sueldos suben a 41.339 y 38.602 dólares respectivamente.