El vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, ha considerado este jueves "normal, en el marco de mis responsabilidades", la comunicación con el diputado socialista por la Asamblea de Madrid y tertuliano, Antonio Miguel Carmona, en un debate televisivo en el que se abordó la causa por el fraude en expedientes de regulación de empleo tramitados por la Junta y ha defendido que lo hizo para que "tuviera toda la información para poder participar de la mejor manera posible".
A preguntas de los periodistas durante una rueda de prensa en Almería, ha asegurado que el presidente andaluz y secretario general del PSOE-A, José Antonio Griñán, "no tuvo, por supuesto, ningún tipo de contacto por ningún tipo de mecanismo" con Carmona. "No tendrá ni su teléfono, se lo puedo garantizar", ha indicado Jiménez, quien ha asegurado que hay "cosas que uno entiende que puedan ocupar a la opinión pública y otras que no".
"Yo no teledirijo absolutamente a nadie y lo puedo decir con toda claridad. Estaba cumpliendo con mi obligación de, entre otras, cuando un representante de mi partido vaya a una tertulia, debate o coloquio, impedir que se mienta y desmentir a aquellos que lo hace", ha remarcado para, a continuación, subrayar que las revelaciones de Carmona que han creado la polémica "se hicieron en un ámbito que se entiende de intimidad".
Al hilo de esto, ha atacado a uno de los tertulianos en el citado debate, Hermann Tertsch, por la simpleza de equivocar un cargo. "Con un desprecio absoluto por la verdad, dijo que Griñán había sido consejero de Empleo para, así, atacarle mejor". "Yo le dije a Carmona -ha detallado- que fue consejero de Economía entre 2004 y 2008", como si ambos no fueran dos importantes cargos de la Junta de Andalucía.
"Carmona es miembros de la dirección del PSOE, diputado por la Asamblea de Madrid y mi obligación, si no yo no haría mi trabajo, es hacer que, cuando participen en un debate, tengan toda la información para desmentir de forma categórica afirmaciones como esta, hechas con toda la poca vergüenza", ha reiterado.
Jiménez ha concluido con una crítica a la difusión del contenido de ese foro interno en el que se hicieron las polémicas declaraciones. "La verdad es que era un acto interno y privado de partido y alguien, de manera inexplicable, aunque sus razones tendrá, lo grabó todo". "No tiene más trascendencia y tiene que haber un cierto aburrimiento para que esto sea noticia".