Unas 150 personas se han sumado a la convocatoria a las 19:00 horas en la parada de Metro de Argüelles, donde se habían desplegado ocho furgones de la Policía Nacional, con el apoyo de una quincena de agentes de la Policía Municipal.
Un cuarto de hora después, el grueso de manifestantes ha avanzado por la calle Gaztambide entonando consignas como "Casas sin gente, gente sin casas", "No son suicidios, son asesinatos" o el lema de la plataforma de Colau, "Sí se puede pero no quieren".
Los congregados guardaron un minuto de silencio en protesta por que no se aprobara en los mismos términos en que la presentaron la Iniciativa Legislativa Popular contra los desahucios.
La Policía Nacional les ha retenido durante unos minutos al inicio de la calle. Sobre las 19:30 horas y, tras negociar con los portavoces de la PAH, la Policía ha permitido que avanzara la marcha por la calle Rodríguez Sampedro. En el siguiente cruce, un cordón de una veintena de agentes les ha impedido el paso y han acudido varios furgones. En ese momento, les han pedido por megafonía que se dispersaran porque "al formar parte de una manifestación no comunicada a la Delegación del Gobierno, iban a proceder a identificarles para proponerles una sanción". Cuando han comenzado las identificaciones, se han vivido momentos de tensión.
Ante esta situación, una portavoz de la plataforma ha desvelado que el ministro Montoro era el objetivo del "escrache" y ha dado por "buena la acción", por lo que ha pedido a los congregados que se disolvieran. Sin embargo, un grupo numeroso de varias decenas de personas ha permanecido en el lugar donde se encuentra apostada la Policía Nacional.