El Mundo abre su portada con Chipre, "Chipre mantendrá al menos un mes el primer corralito de la UE", porque Pedro J. está muy alarmado. Hay "un panorama de riesgo para España", para variar, y el gobierno "debe presionar a Bruselas para que se levante el corralito de Chipre cuanto antes", que como es sabido siempre tiene muy en cuenta la opinión de Rajoy.
El diario de Pedro J. sigue con su rebote mayúsculo por la reunión de Mas y Rajoy. "UPyD arremete contra Rajoy por comprar con dinero público una moratoria de la consulta. El secreto se les vuelve en contra", dice. Pedro J. echa espuma por la boca. "Lo más grave es que el gobierno ha dado un trato privilegiado al presidente de la Generalitat cuando ni siquiera ha rectificado su plan soberanista y ha utilizado el déficit para negociar en función del calendario político", qué desvergüenza. Y mientras, ¿qué, eh? Pues "CiU y ERC se conjura para afirmar la solidez del pacto. Ni amante despechada ni recelos por el encuentro furtivo", en ERC están tan panchos, confían plenamente en la fidelidad de su pareja.
El País, sin embargo, no da un duro por el matrimonio y le tiene preparada una nueva novia a Mas. "El PP exige a Mas que rompa con ERC a cambio de cesiones del Gobierno". Pero Gobierno y PP tampoco meten prisa, "entienden que Mas necesita tiempo para moderar su proyecto sin que las bases de su partido se le rebelen", que el roce hace el cariño, y claro en este par de meses han estado muy unidos a Junqueras. "El objetivo es que Mas se vaya distanciando de ERC", que es muy mala compañía, y que "regrese paulatinamente" al camino recto del "discurso nacionalista moderado". Tanto lo desean, que "el Gobierno vería con buenos ojos cualquier pacto de CiU que no sea con Esquerra". Cualquier cosa menos esa pelandusca. Y a todo esto, ¿qué dice la afortunada elegida de El País? Pues se ha puesto en plan digno y "asegura que no se dejará utilizar como un clínex". Pero verán como mami El País les convence. Tu a callar y a hacer lo que te digo que es por el bien de la familia.
La Razón opina igual que El País. "Mas redobla los contactos con el PSC y toma distancia con ERC". Dice Marhuenda que ERC se está haciendo la dura. "Ha decidido ponerse de perfil ante las evidentes señales de que el gobierno catalán prepara un cambio de criterio en sus objetivos más inmediatos", pero en el fondo está dolida. Y lo que debemos hacer nosotros es "no solo dale la bienvenida al proceso de rectificación, sino prestar todo el apoyo" y agasajar al hijo pródigo con todo tipo de regalos y parabienes. Además, tras los titubeos de ayer, ya le han dado una pista de cómo abordar el asuntillo. "No hay que mirarlo como si fuera una cesión ante un chantaje", no, no. La mala cabeza de Cataluña exige "medidas que no tienen por qué suponer un trato de favor frente a otras autonomías", para nada. "Es la simple constatación de los hechos".
Además del Papa y sus "doce apóstoles", ABC se maravilla de las "Toneladas de billetes del BCE para mantener Chipre a flote". Y se lía a palos con la UE por la "desastrosa gestión" de esta crisis. "No es razonable generar la impresión de que no hay refugio seguro para el dinero de los contribuyente honrados", leñe. "El corralito bancario en Chipre no es solo una deshonra para toda la zona euro, sino un fracaso de las instituciones europeas". Vamos, otro más. También cuenta ABC quien manejaba el asunto de los ERE. "Un alcohólico, un cocainómano y un camello, testaferros de los ERE". Qué nivelazo.
Jose Maria Carrascal defiende que Rajoy no le exigiera a Mas que se deje de embajaditas si quiere pasta. "Tampoco es cosa de ensañarse", dice. "A fin de cuentas, todos somos españoles, aunque algunos se empeñen en no serlo, y estamos en Semana Santa, que es tiempo de perdón". Pues Carrascal, si no te importa, perdona con tu dinero, ¿vale? Es que los demás andamos un poco achuchadillos. "Se acabó el chantaje al que los nacionalistas nos vienen sometiendo. Parece que hemos aprendido a decirle no", dice el pardillo. Se nota que no había leído lo que cuenta su periódico unas páginas más adelante. "Mas se gasta un millón de euros en celebrar el aniversario de 1714". ¿Así que hemos aprendido, eh? Pues yo diría que nos siguen chuleando como quieren.
La Gaceta ilustra su portada con una gran foto de los legionarios procesionando, que siempre es muy vistoso. "Pasión de España. La España real celebra la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret desafiando a la crisis y a la desesperanza". En el editorial explican a que se debe el fervor semanasantero. Para hacer rabiar a la "furia sectaria de los laicistas", que "intente proyectarse precisamente sobre estas celebraciones". Pues que se joroben, "la España real, un año más, ha salido a las calles", "la Semana Santa es una de sus expresiones más acabadas" del catolicismo español. "En ella emerge una realidad que muchos quisieran ver abolida". Y al que le pique, que se rasque.