Rubalcaba delega en Valenciano el partido para "cumplir el contrato" hasta 2016

Ni los mismísimos dirigentes recién nombrados para reforzar la imagen de cambio, sabían cuáles eran sus funciones ni el papel que ostentarán a partir de ahora. "No me preguntéis porque no lo sé. No ha quedado claro, casi no hemos hablado de eso", así se pronunciaban algunos de ellos a la salida de una reunión "poco rutinaria" de la Ejecutiva Federal, en palabras del propio Alfredo Pérez Rubalcaba.

Inusual porque los cambios anunciados no han sido tales a nivel de estructura de la formación salvo para una persona: el secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien anunció en rueda de prensa en Ferraz que, a partir de ahora, "vamos a delimitar el papel del secretario general y el de la vicesecretaria general". El secretario general, se va a "volcar en su papel de líder de la oposición. Voy a incrementar mi agenda social, voy a estar más presente en la sociedad y voy a reforzar mi agenda internacional que saben que son fundamentales los temas de Europa". 

Por contra, Elena Valenciano "va a concentrarse en el trabajo interno, la coordinación de la Ejecutiva como figura en el reglamento, lógicamente las dirección de coordinación con el grupo parlamentario y la agenda de comunicación, la dirección de comunicación".

El líder socialista explicó que "mi agenda interna a veces va en detrimento de mi agenda social. Mi agenda interna a veces va a en detrimento de mi agenda internacional que yo tengo que cuidar". O lo que es lo mismo, los crisis interna supone un lastre para la imagen externa de un Rubalcaba que se vanagloriaba de incorporar "experiencia al mismo tiempo que juventud" para poder cumplir el más prioritario de sus objetivos.

"Yo tengo un contrato que tiene un tiempo y un contenido. Y voy a cumplir mi contrato", dijo tras lamentar "desilusionar a la parroquia" de periodistas que insistían sobre la continuidad de Rubalcaba al frente del PSOE. "Ese no es el debate y no ha sido el debate, por mucho que algunos se empeñen", afirmó desvelando que ni un sólo dirigente de la Ejecutiva había considerado que los aireados cambios se quedaban cortos para la profundidad de la situación.

"Un error de principios"

Se trata de corregir errores "gravísimos", en palabras de Rubalcaba que admitió que se trató de "un error de principios del partido socialista", a preguntas de Libertad Digital. Para ello, el PSOE reforzará las areas de igualdad en las direcciones parlamentarias de Congreso y Senado con una portavoz de área en las direcciones de los grupos parlamentarios, que sé otorgan a Carmen Montón y María Chivite, respectivamente. Habrá otro portavoz, éste de coordinación territorial en el ámbito parlamentario en poder del riojano César Luena.

Pierden peso los actuales repsonsables de comunicación, los visibles Óscar López y Soraya Rodríguez, y lo ganan Elena Valenciano y Ramón Jáuregui que entra en la Ejecutiva federal en la figura del delegado federal que se encargará de la organización de la conferencia política con la que el PSOE pretende modernizar el partido.