Aunque Griñán no incluyó a CSIF en su primera ronda de contactos con agentes sociales y partidos, obteniendo la protesta del sindicato, posteriormente rectificó y recibió en San Telmo al presidente del CSIF en Andalucía, José Luis Heredia. Pero ahora es la UGT, la que desafiando la actitud de Griñán, anuncia que no se sentará a ninguna mesa con CSIF.
La importancia de la postura de Griñán deriva de que el CSIF mantiene una alta litigiosidad contra el Gobierno de Griñán por el plan de reordenación del sector público, la ley del enchufismo, aprobado en 2010. Desde ese año hasta prácticamente las elecciones el CSIF junto con otros sindicatos como el SAF y plataformas como Defiendo mi Derecho, se manifestaron masivamente en las calles contra la Junta por la consideración como empleados públicos de los contratados en las empresas y agencias.
El líder del sindicato CSIF en Andalucía, José Luis Heredia, reconoció que el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, había abierto una "nueva vía de diálogo" con esta organización que se traducirá en su incorporación a la negociación del bautizado pacto por Andalucía, donde centrará sus aportaciones en materia de función pública. La decisión del sindicato CSIF supone un acercamiento al Gobierno andaluz tras meses de enfrentamiento por la reordenación del sector público que acordó el Ejecutivo de Griñán y se produce tras la sentencia del Tribunal Supremo que consiidera "empleados públicos" a los contratados externos de entes públicos y empresas públicas andaluces.
Hasta ahora, sólo participaron en las negociaciones los sindicatos CC OO y UGT, lo que llevó a CSIF a solicitar por escrito al presidente de la Junta su presencia en este proceso como "primer sindicato dentro de los empleados públicos andaluces".
Ahora, el CSIF ha asegurado que comparten "tesis parecidas o iguales" en bastantes asuntos con Griñán, ya que CSIF busca estar presente en más ámbitos. "No existía el diálogo y ahora esperamos que lo haya en cuestiones básicas", ha comunicado.
UGT no se sienta con sindicatos de esa "clase"
La UGT de Andalucía se ha negado a sentarse con CSIF en una misma mesa para hablar del pacto. Es más, ha comunicado que "si CSIF aparece, UGT no entrará en las reuniones", palabras textuales comunicadas a Europa Press por el vicesecretario general de Relaciones Laborales y Política Institucional de UGT-A, Dionisio Valverde.
Valverde ha indicado que la próxima semana habrá una nueva reunión de los agentes económicos y sociales con la Junta para hablar del 'Pacto por Andalucía' y para hablar del acuerdo por el empleo y la actividad productiva y "si el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, ha decidido incorporar a CSIF, no será a las reuniones nuestras para hablar del pacto, pues UGT no se va a sentar en una misma mesa para hablar del pacto con ese sindicato y si CSIF aparece, UGT no entrará en las reuniones".
En ese sentido, ha indicado que el sindicato "tiene su propia sectorial de empleados públicos, la FSP, que es más representativa que CSIF, que no es el sindicato mayoritario entre los empleados públicos; podrá ser mayoritario entre los funcionarios de la Junta, pero creemos que esto es una cosa más amplia, pues los laborales y el personal de las agencias también son empleados públicos".
"CSIF debería pedir perdón por todo lo que hizo en contra de la ley de reordenación del sector público, pero, en cambio, ahora viene con esta pantomima", ha aseverado el dirigente sindical, quien reconoce que no entiende a la Junta en ese sentido de haber aceptado la entrada de CSIF, ya que "ahora la Junta tenia una posición de más fuerza, con la sentencia del TS en la mano, para que CSIF pidiera perdón por todo lo que ha hecho contra la reordenación".
Valverde apunta que si la Junta abre una línea de interlocución con CSIF "tendrá un problema si no abre esa línea para los sectores de función pública de UGT-A y CCOO-A, que tienen mayor representación que CSIF en el ámbito de toda la Junta".