Crece el temor a la venta de los "informes sensibles" de Método 3

Según publica este sábado el diario El Mundo, "la Policía cree que 200 informes de Método 3 están a la venta". Se trataría de informes con información delicada de personajes poderosos, como políticos, empresarios o jueces.

La información, que firma Casimiro García Abadillo, cuenta cómo la ya famosa agencia Método 3 guarda más de 25.000 informes de sus seguimientos e investigaciones. La mayoría de ellos, encargados por clientes que trataban de averiguar la infidelidad de su esposa o por casos laborales menores. Pero dentro de esos miles de informes, habría 200 dossiers que recogen información relevante sobre personajes públicos españoles, como políticos, empresarios y jueces. Una información muy jugosa que podrían querer otros personajes poderosos o servicios secretos de otros países.

El problema, cuenta Abadillo, es que la Policía teme que el dueño de la empresa, Francisco Marco, esté dispuesto a vender dicha información. Los motivos que empujan a la Policía a esta sospecha pasan por la dificultad financiera que atraviesa Método 3, y por la decisión de Marco de entregar su licencia de detective (TIC) y su intención de marcharse a vivir al extranjero, concretamente a la República Dominicana, como han contado algunas fuentes a la Policía.

Miembros de las Fuerzas de Seguridad temen que, "por si fueran poco las bombas de Falciani y la de Bárcenas, ahora tenemos la bomba Marco. Esperemos que no estallen las tres a la vez".

Una de las hipótesis que se mantienen es que la cabeza visible de Método 3, Francisco Marco, habría pactado la filtración de las escuchas a Camacho y la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola con el director de Análisis y Prospectiva, Xavier Martorell, con el objetivo de quitar presión política y mediática a la familia Pujol y a Convergencia, "mezclados en escándalos de corrupción", dice García Abadillo.

La tesis pasaría porque la grabación de la citada conversación demostraría una "cacería política" que reforzaría la gran baza del nacionalismo. La Policía piensa que "el grueso de la información sensible sigue controlada por Marco".