Es la hora de los grafólogos, desde el caso Bárcenas al caso de los ERE. En este último, un manuscrito que advertía de la inclusión como intruso de un ex alto cargo del PSOE, Juan Rodríguez Cordobés, sigue sin autor reconocido. La Junta dice desconocer quién es el autor de la letra del papelito. Es más, ha informado al Juzgado de Instrucción 6 de Sevilla de que no le consta la identidad del autor de la nota que reconocía la inclusión de Cordobés en el ERE de Calderinox en póliza al margen de las demás.
El documento se extendió el 16 de septiembre de 2009 en una reunión de alguien más con José González Mata, responsable de la consultora jerezana Uniter, la que se encargó de los cálculos del ERE de Calderinox e hizo de broker para seleccionar la mejor oferta entre las aseguradoras del mercado.
Que la reunión existió lo prueba el hecho de que la agenda electrónica del entonces director general de Trabajo y Seguridad Social, Juan Márquez, consta a las 13:00 horas "Reunión con Pepe González Mata", pero la Junta afirma que no hay constancia de la asistencia de Márquez a la reunión ni la de otras personas.
Lo que admite la Junta de Andalucía es que la reunión se celebró con González Mata y que alguien anotó la prejubilación fraudulenta de Juan Rodríguez Cordobés, socialista procedente del Partido Comunista, que fue delegado provincial de la Consejería de Trabajo y Asuntos Sociales en Sevilla en la sede oficial de la Consejería.
Lo cierto es que se abrió una póliza a nombre de Cordobés que, relata El Mundo, percibió por ello 36.000 euros aunque no había trabajado nunca en la empresa Calderinox. Su última ocupación fue la de gerente de la escuela de artesanos Della Robbia, en el municipio sevillano de Gelves, un centro que depende de la Junta de Andalucía que lo nombró a dedo.
Y lo cierto es además que dos meses después de la reunión en la que se manuscribió la posibilidad de prejubilar de intruso al ex alto cargo, el entonces director general Juan Márquez concedió una subvención excepcional de 898.571,56 euros a Calderinox.
Sobre Cordobés pesa la imputación por tres delitos: prevaricación, malversación de fondos públicos y obtención ilegal de ayudas. Cuando estalló el caso, consignó en el Juzgado los 36.000 euros que percibió de manera fraudulenta.
Más letras sin identificar
La Junta de Andalucía, además de no saber de quién es la letra del manuscrito de Cordobés, tampoco sabe el autor de otra nota manuscrita del caso Surcolor fechada el 8 de octubre de 2009, muy parecida a del primer manuscrito.
A la Junta no le consta la identidad de la persona encargada de dar fe de las reuniones de la Dirección General de Trabajo y Seguridad Social en aquella época. Tampoco está la documentación básica como las solicitudes de ayudas en el ERE de Calderinox, ni certificaciones de estar al corriente de pago de obligaciones tributarias y con la Seguridad Social de los beneficiarios.