La trama de las ITV pretendía amañar las adjudicaciones diseñando los pliegos del concurso público, modificando las puntuaciones de cada capítulo, de tal forma que lo ganaran las empresas que ellos eligieran. Según informa ABC, el negocio tenía un cabecilla político, Josep Tous, y uno empresarial, Sergi Alsina, ambos íntimamente ligados al secretario general de Convergencia Democrática de Cataluña, Oriol Pujol.
Los pinchazos telefónicos demuestran que Tous, presidente de la sectorial de Energía de Convergencia y excompañero de clase de Oriol Pujol, iba a adjudicar a dedo las estaciones de inspección. En una de las conversaciones que lo demuestran, Tous habla con Josep María Canós, director general de Energía de la Generalidad. Le propone abiertamente manipular el futuro concurso público: "En el plan territorial pueden salir si no las mismas estaciones, en la gran mayoría todas pueden volver a salir. Entonces, una de las condiciones que tú puedes poner es la inmediatez de comenzar a trabajar. Por ejemplo, si ya tienen el solar y la edificación, es muy difícil perderlos, porque si pones en uno de los parámetros inmediatez para comenzar a operar, y además sacando más de tres lotes, que sacamos seis o siete, ¿me entiendes?". Canós acepta la respuesta.
A Josep Tous le interesaba que algunas empresas que ganaron la concesión con el último gobierno del tripartito catalán la mantuvieran. En la citada conversación, apuesta por subir la puntuación del concurso al apartado que a él le interesa: "Si nosotros en el concurso decimos: una de las principales valdrá treinta puntos, la inmediatez de la puesta en marcha; dos, la distribución tal; tres...". Canós asiente, a la que Tous añade: "Sabiendo ésto, nadie apostará por estos lotes, irán por los otros".
Órdenes a Masalles
El aliado político de Oriol Pujol también daba órdenes a otro de los imputados, Isidre Masalles, para que enviara inspectores a los empresarios de ITV que pretendieran impugnar un nuevo concurso.
Uno de los empresarios con intereses en el sector, Ricard Puignou, que está imputado, envió un mensaje de texto a Tous el 10 de octubre de 2011, después de reunirse con Isidre Masalles: "Reunión con Isidre muy bien, tiene claro que eres el ‘jefe’ y él ejecuta, se ha definido como técnico". Fuentes próximas a Masalles sostienen que no cedió a las presiones de la trama y confían en que se levantará su imputación.