La Audiencia cree que no hubo delito en el recibimiento a Bolinaga

El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha decidido inadimitir la querella presentada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) por un delito de enaltecimiento del terrorismo contra el etarra Iosu Uribetxeberria Bolinaga, tal y como había solicitado el Ministerio Fiscal.

En un auto hecho público este miércoles pero con fecha de ayer, el magistrado no aprecia delito en el recibimiento que tuvo el secuestrador del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara en la localidad guipuzcoana de Mondragón porque este fue carente "en todo caso de la difusión, exaltación o expresión pública exigida por la jurisprudencia para la comisión del tipo penal".

El instructor mantiene en la resolución que para que se cometa un delito de enaltecimiento del terrorismo es "preciso que el acto haya tenido cierta repercusión pública pues el tipo penal exige que el enaltecimiento se haga por cualquier medio de expresión pública o difusión".

En este sentido, el juez Pablo Ruz afirma que el acto de recibimiento a Uribetxebarria Bolinaga en el bar Irati tuvo "carácter privado" ya que en el informe realizado por la Policía Autónoma Vasca sobre estos hechos se explica que "los asistentes impidieron a los periodistas y medios de comunicación allí presentes el acceso al local donde permaneció el querellado".

Asimismo, el magistrado afirma que determinados datos aportados en el escrito de la querella tales como que las personas presentes en el mencionado establecimiento portaban banderas a favor de los presos de ETA o profiriendo gritos como "Jo ta ke" – "dale hasta conseguirlo"- "no ha resultado corroborados en el informe de la Ertzaintza que se limita a reseñar únicamente que se portaban ikurriñas y banderas reclamando el acercamiento de los presos al País Vasco".

Por estas razones, el magistrado concluye hay una "falta absoluta de indicios" de comisión de un delito de enaltecimiento del terrorismo por parte del etarra Bolinaga. De esta forma, Ruz acuerda inadmitir a trámite la querella de la AVT y decretar el archivo definitivo de estas diligencias.