La presidenta del Parlamento, Nuria de Gispert, ha abierto la X Legislatura catalana apelando al derecho a decidir de Cataluña, mientras este lunes sigue la incertidumbre sobre la negociación postelectoral entre CiU y ERC, aunque los republicanos ven factible un acuerdo que permita a Artur Mas liderar un Gobierno en minoría.
Mientras aún se desconoce cuándo se celebrará la próxima sesión parlamentaria que permita a Mas ser reelegido presidente de la Generalidad, De Gispert ha sido reelegida al frente de la cámara en el primer pleno de la legislatura con 79 votos a favor, 52 abstenciones, y tres votos nulos.
El pleno también ha elegido, como secretarios de la Mesa, a Miquel Iceta (PSC), Pere Calbó (PP), Josep Rull (CiU) y David Compañon (ICV-EUiA), por lo que los únicos partidos que no estarán representados en este órgano son C's y CUP.
En su primer discurso tras ser reeelegida, De Gispert ha esperado que la nueva legislatura implique alcanzar nuevos horizontes, y ha dicho que está marcada por la crisis económica, la desafección política, "lograr unas relaciones diferentes con España", y la autodeterminación.
Ha recordado que tanto "en las calles como en las urnas" se refleja una mayoría de catalanes que desea ejercer el derecho a decidir; ha citado en su intervención la manifestación independentista de la Diada, y ha definido a Cataluña como un pueblo en marcha dispuesto a abrir un camino.
Sin referirse explícitamente a la independencia, Núria de Gispert ha considerado que en el contexto actual es muy necesario que el diálogo, la paz y la concordia marquen la vida parlamentaria.
El discurso ha sido criticado por el líder del PSC, Pere Navarro, que ha visto una intervención "frontista" alejada de fomentar la concordia entre los catalanes, mientras que la líder popular, Alicia Sánchez Camacho, ha acusado a CiU de anteponer su proyecto soberanista a la salida de la crisis.
Joan Herrera (ICV-EUiA) ha celebrado que del primer pleno de la legislatura salga un Parlamento con órganos de gobierno más plurales, mientras que Albert Rivera ha instado a CiU a presentar un candidato alternativo a la investidura si quiere "tender puentes" con la oposición.
Sobre pactos postelectorales, el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran (UDC), ha asegurado que la federación trabaja para sellar "lo más pronto posible" un acuerdo de estabilidad con ERC antes de la investidura, que podría posponerse al 4 de enero alargando al máximo los plazos que permite el reglamento del Parlamento regional.
En cambio, ERC ha indicado que, como ellos pretenden que esta sea una legislatura "histórica", no quieren que la prisa impida un buen acuerdo, en palabras de su 'número 2', Marta Rovira.
La nota de color en el pleno la ha protagonizado la CUP: sus votaciones han sido nulas, puesto que han escrito nombres como el de un ciudadano de Valencia que iba a ser desahuciado y el de Ester Quintana, herida durante la manifestación de la pasada huelga general, algo que ella atribuye a la acción de los Mossos en la zona en ese momento.
Una de las tres diputadas de la CUP ha irrumpido en el pleno con la camiseta verde de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), mientras que el secretario cuarto de la Mesa, David Compañon, ha lucido otra prenda reivindicativa, en su caso de color amarillo, del colectivo en defensa de la escuela pública.