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Broncazo a Wert en 'La Razón' por la ley del castellano

La prensa se vuelca con Wert, que está aportando momentos inolvidables a la legislatura.

El Mundo dice que a Wert se le han hinchado las narices y ha mandado su ley a freír espárragos. "Wert recula ante la amenaza de Mas de no aplicar su ley". Anda y que os zurzan. Pedro J. es el que no se rinde. La modificación es "inadmisible", el ministro "se ha rendido ante el pulso" catalán pero eso "ni siquiera sirvió para apaciguar" a los catalanes que están otra vez como la Dolorosa. "Mas pretende usar esta polémica para recuperarse del varapalo del 25-N", dice con ese ojo clínico que le caracteriza. "Resulta desconcertante y descorazonador", dice un Pedro J. desolado. "Lo que parecía un paso decidido en defensa del bilingüismo real se ha esfumado". Ale, ale Pedro, pero si tenías que estar ya curado de espanto, hombre.

Federico Jiménez Losantos dice que "la chapucilla de Wert ha servido en bandeja a Mas la ocasión de rasgarse las vestiduras". Ya te digo.  Yo creo que le paga. "Si a las bandas del 4% y del 3% les quitas la bandera separatista, ¿en qué se quedan? En Díaz Ferrán. De hecho, si el ex jefe de la CEOE se llamara Gerard y no Gerardo estaría ya ocupando la hornacina del Empresario Modelo de Cataluña que Pujol habilitó para Javier de la Rosa".

ABC se hace un regalo en forma de titular. "Bustos deja la alcaldía de Sabadell tras las revelaciones de ABC" y le da un disgusto a Chacón. "El alcalde maniobró para que Chacón le ayudara a conseguir que la junta andaluza beneficiara a un empresario amigo". A Wert le defienden a capa y espada. "La reforma es imprescindible" y "la polémica más agria se ha suscitado nuevamente con el nacionalismo catalán", qué tíos más broncas, siempre liándola. La reforma solo pretende "algo tan elemental como garantizar que en España se pueda estudiar en castellano".

Pues a El País, la voz del nacionalismo catalán en Madrid, no le parece tan elemental, sino que pretende "finiquitar el sistema de inmersión lingüística", "acabar con la preeminencia del catalán en la educación" en un "ataque sin precedentes al sistema de inmersión lingüística", en definitiva, "un torpedo" para el catalán. Mas, el santo que antaño tildó El País de dirigente con "ribetes caudillistas" se "rebela contra la ley Wert por su ofensiva frente al catalán". Y encima "alimenta el sentimiento de agravio en Cataluña", que como todo el mundo sabe está siempre a flor de piel.

Pero la mayor bronca le cae a Wert en las páginas de La Razón. Seguro que esta no se la esperaba. Venga, venga, hoy te has levantado chistosa, dirán. Que no, que no, vean. "El objetivo que pretende la reforma (...) es loable y congruente (....) Cosa bien distinta es si el ministro de Educación ha empleado la metodología adecuada para lograr su propósito sin darle ventaja al victimismo nacionalista", dice a modo de aperitivo. "Habría sido deseable un mayor esfuerzo negociador" para evitar "crispación" y "estériles enfrentamientos", le atiza el segundo coscorrón. "Seria conveniente que el ministro Wert trabajara con más ahínco para limar diferencias". Ésa ha sonado, ¿eh? "El proyecto es susceptible de modificaciones (...) para disipar malos entendidos, uno de los cuales es que la enseñanza en catalán queda relegada a la cuarta fila. No es cierto, pero no estaría de más hacer el esfuerzo para clarificarlo", toma guantazo. Eso por hacer enfadar a los catalanes.

La Gaceta: "El Gobierno acierta". Pero hombre, esta portada hay que llevársela hoy a Rajoy a la cama. "El Gobierno ha querido abrir el debate" de la enseñanza del castellano "y no podemos sino aplaudir esta actitud tan valerosa como de sentido común". A Rajoy se le van a saltar las lagrimitas.

La Vanguardia se mesa los cabellos. "La exigencia de más castellano invalida de hecho la inmersión". "Mas convoca a los partidos para defender la lengua propia". "Clamor por la insumisión ante la reforma educativa de Wert", etc, etc, etc. Y eso que los muy pillines ya saben que se ha rectificado. Lo cuentan en Tendencias, por lo bajini. "Tras el terremoto vienen las reparaciones". El Ministerio ha introducido "un cambio sustancial en el borrador de la nueva ley" y "hay dudas en el PP sobre el envío de alumnos a centros privados con clases en castellano". Qué zorritos, si es que se las saben todas.

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