El recuento de las entradas de la trágica fiesta de Halloween en el Madrid Arena se ha quedado en 9.257 con la apertura de sólo la mitad de las cajas existentes, una cifra que se acerca al total que el presidente de Diviertt, Miguel Ángel Flores, dijo que se habían vendido, tanto en el atestado policial como ante el juez instructor, Eduardo López Palop.
Es decir, el número de entradas vendidas para la fiesta del Madrid Arena en la que murieron cuatro jóvenes puede ascender a más de 18.500, puesto que ya se han abierto la mitad de las urnas y se han contabilizado más de 9.000 tiques, según apunta Abdon Núñez, abogado de la familia de Belén Langdon, una de las fallecidas. El letrado ha explicado que a lo largo de la mañana se han abierto cuatro de las ocho cajas que contienen las entradas de la fiesta de Halloween, en las que se han contado 9.257 tiques, lo que permite suponer que se superarán las 18.500, según su propia estimación.
El recuento de las entradas, que ha comenzado sobre las diez de la mañana en la Jefatura Superior de Policía de Madrid con la presencia del juez instructor, la fiscal y las partes personadas en la causa y ha finalizado pasadas las dos y media de la tarde, se reanudará el próximo miércoles.
El abogado ha detallado que en una de las cajas abiertas había 2.485 entradas, en otra 2.124, en la tercera 2.888 y en la cuarta y última 1.760, a la espera de conocer el cálculo del resto de las cajas que aún quedan por abrir. Abdon Núñez ha considerado un "verdadero escándalo" que con la mitad de las cajas contabilizadas ya casi se haya superado el aforo previsto. Así, ha precisado que a las 18.500 entradas que puede haber en las cajas, habría que sumar las 3.000 personas que supuestamente accedieron al recinto pasadas las tres de la mañana tras hacer botellón en los alrededores, con lo que en el Madrid Arena se habrían congregado unas 20.000 personas, un hecho que ha calificado "terrorífico y terrible".
El letrado ha expresado su "indignación", por el hecho de que hace dos días el dueño de la empresa organizadora del evento, Miguel Ángel Flores, dijese que había vendido 9.650 entradas y se ha preguntado si "habrá mentido en todo lo demás". Asimismo, ha señalado que Flores dijo que había dos tipos de entradas, cuando el recuento ha revelado que son más de catorce, y de hecho hay entradas que valen hasta para ocho personas, si bien, ha mencionado, aún es pronto para saber si hay entradas falsas y con numeración repetida. Además, ha definido como una "una verdadera tragedia y un verdadero escándalo" el que no "hubiese ningún tipo de control" en los accesos.
Algunos tenían pulsera, no entrada
Por otra parte, Virginia López Negrete, abogada de Manos Limpias, que ejerce la acusación popular, también ha revelado a la prensa que el número de entradas que hay en las cajas podría superar las 16.000, ya que cuando ella ha abandonado el recuento se habían abierto tres cajas en las que había unas 7.000 entradas. López Negrete ha añadido que a las entradas que se contabilicen en las urnas habrá que sumar las pulseras que llevaron algunos asistentes para poder acceder al recinto, y sobre las que se desconoce su procedencia.
Ambos abogados han valorado la minuciosidad con la que se está haciendo el recuento en presencia del secretario judicial y con la ayuda de numerosos policías de la brigada de homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, que sacan las entradas una a una y las clasifican por tipos.
Por último, el letrado de la familia de Belén Langdon ha pedido que declare en el caso "prácticamente toda la cúpula de la Concejalía de Seguridad", como su titular, Antonio de Guindos, el jefe de la Policía Municipal, Emilio Monteagudo, así como el responsable de servicios de emergencias de emergencias y el de seguridad.