Por fin, su lucha personal dio sus frutos. Sonia Palma, la madre de los gemelos de cinco años que necesitaban recibir clases en castellano y que un colegio público de Baleares no lo contemplaba, ha conseguido que la consejería de Educación le dé, al fin, la razón.
Con la ayuda de Fundación Círculo Balear (FNCB), que fue la que interpuso la reclamación ante la consejería en nombre de los padres, los niños Álvaro y Óscar deberán tener primero "consolidada" la lengua materna y "posteriormente llevar a cabo las transferencias a la segunda lengua". Por lo que la consejería de educación insiste al recomendar "una adaptación curricular en la que les consolide la lengua materna. Primero lengua materna y después la segunda lengua", apostilla.
En la reunión mantenida con el equipo directivo y tutores del colegio Ponent de Inca, los padres y el Círculo Balear, se ha realizado una adaptación curricular elaborándose un nuevo horario en el que toda la lectoescritura se hará en español, 6 horas semanales, además de un refuerzo de horas de logopedia también en castellano, 3 horas más. El resto de materias (religión, música y gimnasia) se realizarán en la otra lengua cooficial, excepto las horas de inglés que se harán en esta lengua. Es decir, que de las 22,5 horas lectivas semanales, si no contamos las 2 horas y medio de patio, 9 horas se impartirán en español. El resto en inglés y en catalán", explican desde la fundación.
Palma está contenta con la resolución, pero lamenta lo que han tenido que pasar hasta que llegara este momento: "No tendríamos que haber sufrido todo esto, hasta una cacerolada en la puerta del centro con mis hijos presentes, para que un colegio público haga efectivo un derecho y algo que ya sabíamos: que los niños primero tienen que consolidar la lengua materna antes de pasar a la otra lengua."
"Hemos conseguido las 6 horas mínimas de lectoescritura y después el refuerzo de logopedia de 4 sesiones semanales. Hemos mejorado porque antes me daban 6 horas en castellano incluyendo las sesiones de logopedia y sin lectoescritura. Se empleaban para tareas diversas, no para lectoescritura. Siempre he querido que mis hijos aprendan las dos lenguas oficiales, pero que hicieran la lectoescritura obligatoriamente en catalán les estaba perjudicando", manifiesta.
"Lectura y escritura", primero en lengua materna
Lo más notable de esta resolución, más allá de dar respuesta a los gemelos y su familia, es el precedente que ésta sienta. Y es que el informe de la consejería reconoce que "respecto al aprendizaje de la lectura y la escritura, se debe iniciar, según información de organismos internacionales en niños sin patología, en la lengua materna (L1)".
Es por esto que el presidente de la FNCB, Jorge Campos, lo ha considerado "una victoria para todos los ciudadanos que defendemos los derechos lingüísticos individuales y las libertades ciudadanas, y en concreto, para los niños Álvaro y Óscar, una satisfacción por haber conseguido lo mejor para ellos. La finalidad es conseguir lo mejor para los niños y que la lengua no sea un problema en la educación".
Campos ha añadido que "este informe es muy importante para los que defendemos la libertad lingüística puesto que da la razón a los argumentos defendidos siempre por el Círculo Balear. Demuestra que no hay problema alguno para llevar a la práctica la libre elección de lengua, siendo el mejor sistema para respetar los derechos de los hablantes de ambas lenguas y para el correcto desarrollo de los niños, frente a la inmersión en catalán que se sigue sufriendo en las escuelas de Baleares". "Además – ha subrayado– en el momento en el que la consejería de educación ha dictado unas instrucciones claras y precisas de cómo aplicar la elección de lengua el equipo directivo del centro se ha mostrado colaborador para cumplir con el informe. Lo que demuestra que si hubiera voluntad política en cumplir con la libre elección de lengua no habría demasiados problemas a la hora de hacerla efectiva en los centros educativos".
No obstante, el presidente de Círculo Balear considera que "algo funciona muy mal en este país cuando para escolarizar a unos niños en su lengua materna, si ésta es la española, la común y oficial del Estado, debe superar tantos obstáculos. ¿Cómo es posible que con un gobierno del Partido Popular con mayoría absoluta haya tantos problemas para hacer uso de un derecho que no perjudica a nadie? Máxime cuando su programa electoral, respaldado por la mayoría de los ciudadanos, se compromete a facilitar la elección de lengua y a garantizar la enseñanza en castellano en todas las etapas educativas", denuncia.