Primero, se atacó a la Corona haciendo un parodia del Rey y, ahora, a la Guardia Civil. El Ayuntamiento de Alsasua (Navarra), gobernado por Bildu, ha permitido una pantomima contra las Fuerzas de la Seguridad en la que se simbolizó la toma del cuartel de la Guardia Civil.
Los hechos se produjeron, según desvela el diario La Razón, en una de las plazas del municipio, en la que se construyó una caseta que simbolizaba el edificio oficial, con la bandera nacional incluida. En el transcurso del teatrillo, se expulsa a unos supuestos agentes de la benemérita y se cambia la enseña nacional por la ikurriña.
Coincidiendo con estos hechos, Bildu pidió formalmente -con el apoyo del concejal del PSOE Francisco Javier Dondo- que la Guardia Civil y la Policía Foral abandonen el municipio, en la que el terrorismo callejero no ha cesado pese al anuncio de ETA de no cometer atentados.