Johnson escribe una columna semanal para el rotativo Daily Telegraph, que le paga la citada cantidad, la cual se suma a las 140.000 libras (163.000 euros o 228.000 dólares) al año que cobra por trabajar como alcalde de la capital británica.
En la entrevista con la BBC, Johnson utilizó el término "chicken feed", literalmente "pienso para pollos", para referirse a este dinero y, aunque reconoció que había sido "frívolo", reclamó su derecho a escribir estos artículos en su tiempo libre.
"No veo por qué no debería escribir un artículo en un domingo por la mañana. Si alguien me quiere pagar por él es su problema", dijo el alcalde, que tiene reputación de ir por su cuenta en el seno del Partido Conservador, que no quiso hacer comentarios.
En el actual momento de crisis económica, el líder de los conservadores británicos, David Cameron, ha pedido a los principales dirigentes del partido que dejen sus segundas ocupaciones como una muestra de sensibilidad hacia la gente que ha perdido sus empleos.
Pero Johnson, a tenor de sus declaraciones, no tiene la intención de hacer caso al líder de su partido: "Para mi es una manera de relajarme mentalmente. No sé por qué debería dejar de hacerlo".
Sus declaraciones fueron criticadas por David Prentis, secretario general de Unison, uno de los principales sindicatos del sector público, quien acusó a Johnson de "estar en otro planeta".
"Vive completamente al margen de lo que viven sus funcionarios, al margen de la gente de Londres y del resto del planeta Tierra si piensa que un cuarto de millón de libras es una bagatela", manifestó Prentis, que pidió a Johnson que se disculpe públicamente.
Jeremy Dear, secretario general de la Unión Nacional de Periodistas, afirmó que 250.000 libras "no son una bagatela para aquellos periodistas que están trabajando en Londres con sueldo que no superan las 16.000 libras al año".
Un portavoz del alcalde citado por el diario The Guardian indicó que el alcalde no tiene la intención de disculparse porque "quedó bastante claro que no era un comentario en serio".
Pese a su limitada experiencia política y a que apenas había vivido en Londres, Boris Johnson, conocido por su pelo rubio, su labia y sus meteduras de pata, conquistó en mayo de 2008 la alcaldía capitalina.
Nacido en Nueva York en 1964, este típico inglés de clase alta que estudió Humanidades en Oxford se ha hecho popular por su estilo desenfadado y por ir a trabajar cada día en bicicleta.
Su tendencia a los deslices verbales es legendaria, como cuando prometió a bombo y platillo que recuperaría los viejos autobuses de dos pisos y sin puertas, retirados por inseguros, para después retractarse y admitir que sería demasiado caro.