Es la segunda vez que desfila para la edición de 'El Ego' y en esta ocasión Moisés Nieto ha querido transportar a un ambiente puro y sencillo propio de los lugares sagrados. La religión ha sido el punto de partida de 'Virginia', una colección inspirada en los hábitos monacales.
A través de los sencillos patrones que visten los monjes, Moisés Nieto ha creado una línea sencilla de cortes rectos que intenta crear una prenda que refugia las curvas femeninas pero jugando con los tejidos que dejan adivinar partes íntimas de la mujer.
Tejidos nobles y clásicos, utilizados tradicionalmente, como lanas cocidas, alpaca o paño, se combinan con géneros invernales como la piel, el ante o el pelo a modo de ensambles, o integrando géneros innovadores como el neopreno, consiguiendo crear una prenda de gran elegancia.
Las camisas blancas actuaban de combinación obligada en vestidos de corte en la cintura, faldas de vuelo y pantalones de pata de elefante. El estampado de animal print disimulado compaginaba looks sobrios con gasa pintada con motivos cenobíticos.
La noche monacal de Moisés Nieto se compone a base de vestidos plisados y de tejidos vaporosos que juegan con seductoras transparencias y una selección de texturas combinadas entre sí. Vestidos de vuelo y de corte simple adornados en el bajo con un pequeño detalle en ruffles de color ocre engalanan los looks de noche.
Los accesorios hacen atractivos los looks de 'Virginia', advirtiendo con pequeños detalles un look completamente claustral. Collares babero y en forma de cuellos de camisa bañadas en oro, gargantillas que caen en cascada, brazaletes dorados y cinturones rígidos destacaban en diseños sobrios de escotes inexistentes.
Mutación del cuerpo de Shen Lin
La confección a través del ideal hace que Shen Lin invente una nueva fecha en el calendario con una combinación heterogénea de la moda en la colección llamada '31 de febrero'. El diseñador crea una estética demodé en una línea sobria de cortes inacabados.
Una colección singular a base de tejidos como el dénim, el fieltro y el punto combinan con brocados, jacquard o lana, creando looks reveladores de estética muy cuidada. Destacan las faldas plisadas de doble efecto en tonos verde oliva y marrón chocolate en diseños que aportan una notable feminidad.
Decoran los diseños los accesorios que nos transladan al fondo marino, decorando con tocados, collares y detalles en los clutch con caracolas de mar y pequeñas ramitas de coral en tejidos como el terciopelo.
Las plumas combinan a la perfección a modo de tocados y aportando elegancia en guantes largos de piel en tonos violáceos en los insólitos diseños que propone Shen Lin para la próxima temporada.
El calzado aporta un sentido de singularidad a los diseños. Zapatos bajos acordonados acabados en punta calzaban cada look, tanto de día como de noche, de la colección '31 de febrero' que colorea todas las salidas en tonos grises y ocres.
Los estampados llegan para la noche en originales túnicas oversize mezclando en tonos grises, rojos lavados y ocres con motivos florales las propuestas nocturnas de Shen Lin.