Con cinco guardaespaldas y una quincena de amigos, el príncipe Harry de Inglaterra llegó el domingo en su barco a la ciudad de Hvar, en la homónima isla croata de la costa central del Adriático, para divertirse bebiendo y bailando en una de las discotecas locales.
Aunque Harry y su séquito llegaron a Hvar de madrugada y trataron de pasar inadvertidos, fueron descubiertos por un reportero del diario croata Jutarnji list del que no pudieron deshacerse y al que Harry al final invitó a tomar con él varias copas de vodka y whisky.
Según el periodista, el propio Harry, de 27 años el hijo menor de Carlos de Inglaterra y ladi Di, le dijo: "Ahora puede contar a todos que bebió con un príncipe".
El príncipe Harry, apodado por algunos medios ingleses como El Sucio, aseguró al reportero que lo "está pasando estupendamente en Croacia" y que es la primera vez que se encuentra en este país.
Según recoge Efe, el príncipe británico bebió y bailó mucho la madrugada del sábado al domingo, tirándose vestido varias veces a la piscina de la discoteca.
Por la mañana se retiró a su barco anclado cerca de Hvar, isla croata conocida como lugar de buena diversión durante el verano, que ya han visitado miembros de varias casas reales europeas.
El alcalde de Hvar, Pjerino Bebic, confirmó a la agencia de noticias croata Hina que el príncipe Harry se encuentra en la isla, pero dijo que él y sus acompañantes no han pedido nada de las autoridades locales.
Bebick manifestó que el príncipe se quedaría al menos cuatro o cinco días en la isla y expresó su deseo de que lo pase bien durante su estancia.
Hina cita a otros testigos que aseguran que Harry y sus amigos comieron marisco en un restaurante de Hvar ya antes del pasado fin de semana, pero habrían pasado en esa ocasión inadvertidos por la prensa.