El pasado lunes, en pleno concierto en el londinense iTunes Festival, Dave Grohl dejó de cantar cuando vio que comenzaba una pelea. "Cabrones, ¡parad!", exclamó enfadado el líder de Foo Fighters.
Grohl le llamó "gilipollas" y "cabrón" varias veces y le pidió repetidamente que le mirara. Después, le exigió que dejara el concierto, diciendo que a sus recitales la gente venía a pasarlo bien "y no a pelear". "Viene ese cabrón y lo jode", se quejó.
El público reaccionó abucheando al fan y aplaudiendo al grupo, que después del incidente siguió cantando.