(Libertad Digital) El Servicio de Estudios de esta entidad financiera afirma que en el entorno exterior, parece claro que la severidad de la crisis financiera global es mayor de lo que se anticipaba y nuestra economía no es ajena a ello, ya que es muy dependiente de financiación exterior y de la evolución de los mercados financieros internacionales.
Un contexto de menor crecimiento económico en los países desarrollados, principalmente Estados Unidos y Europa, conlleva un menor dinamismo de nuestro sector exportador. A esto hay que sumar que la Reserva Federal ha acelerado el ritmo de bajadas de tipos y el euro se ha apreciado más de lo esperado, lo que reducirá la competitividad de nuestras exportaciones fuera de la unión monetaria.
La depreciación del dólar también ha provocado una subida de los precios del petróleo, lo que significa una menor renta disponible para las familias españolas y una reducción de su consumo, además de aumentar el diferencial de inflación y mermar nuestra competitividad.