(Libertad Digital) La noticia saltó por una "metedura de pata" tal y como cuenta The Times en su edición digital. La ministra de Vivienda de Reino Unido, Caroline Flints dejó ver, cuando se dirigía al 10 de Downing Street, unas notas de un informe en el que reconocía la posibilidad de que los precios de la vivienda en este país cayeran, al menos, entre un 5 y un 10 por ciento en 2008. Además, en sus notas reconoce "no podemos saber cómo puede empeorar". Unos datos que coinciden con el nuevo salto de la inflación en tierras británicas que ha subido del 2,5 al 3 por ciento.
Se trata, sin embargo, de una información confidencial que el Ejecutivo pretendía estudiar en privado, pero que se ha conocido a raíz del descuido de la propia ministra cuando se dirigía al número 10 de Downing Street, ya que al portar los apuntes en la mano propició que las cámaras que registraron su llegada captasen parte de la documentación, que revela, entre otras cosas, que la horquilla barajada podría resultar "en el mejor de los casos".
Así, entre los comentarios recogidos en la documentación, que lleva por título 'Caroline Flint-Notas habladas' figura uno en el que el departamento de vivienda asegura "no saber cómo de mala llegará a ser" la situación y otro en el que admite que el negocio de la construcción está "paralizado", en lo que constituye la primera ralentización de este sector en años.
Así, los ministros no hacen públicas las previsiones del ámbito inmobiliario y el propio Gordon Brown había rechazado temores de que se produjese una crisis. Sin embargo, una caída como la barajada del 10% significaría una pérdida de más de 25.000 euros del valor medio de la vivienda y situaría a los propietarios en un severo riesgo de ver cómo el precio de sus casas cae por debajo del montante de sus hipotecas.
Por ello, su difusión se produce en uno de los peores contextos para primer ministro, que al malestar generado por su reforma fiscal, el descontento entre sus propias filas y su caída en picado en las encuestas suma una desfavorable situación económica en la que los últimos datos sobre inflación revelan una subida interanual del 3 por ciento, un punto por encima de las previsiones del Gobierno, y los préstamos para vivienda se encuentran en sus niveles más bajos en tres décadas
Ya en septiembre, numerosos analistas ya señalaban a España y al Reino Unido como los dos países europeos más expuestos a la crisis subprime mientras el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero señalaba que España no acusaría esta crisis porque "aquí no tenemos subprime".
La crisis del sector inmobiliario ya ha agravado notablemente la caída del consumo y de la afiliación a la seguridad social. Además, la presentación de concursos de acreedores de diferentes empresas inmobiliarias se suceden cada semana. No obstante, el Ejecutivo mantenía en Abril que el precio real de la vivienda había crecido un 3,8 por ciento en el primer trimestre. Pese a que se trataba de un aumento de los precios de la vivienda, era la primera vez en 11 años que crecían por debajo del IPC, superior al 4 por ciento.
Por otro lado, según el portal inmobiliario Facilísimo.com, el precio de la vivienda de segunda mano cayó el 4,3 por ciento en el último año. Según este estudio el precio de la vivienda de segunda mano ha bajado en España el 4,3 por ciento en los últimos 12 meses acumulando un retroceso del 2,64 por ciento en lo que va de año.
Además las órdenes de ejecuciones hipotecarias (embargos) han aumentado hasta cifras récord según señaló el ministro de Justicia británico el pasado 9 de mayo. Según el informe del Gobierno británico, la demanda de hipotecas han crecido hasta las 40.000, comparado con las 33.715 del primer trimestre de 2007, mientras que las ódenes de ejecución han crecido hasta las 30.000.