El presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, presentó este miércoles juegos educativos sobre la política monetaria y la inflación dirigidos a jóvenes de entre 18 y 25 años. (Volver)
Capita dijo el día 9 de Diciembre de 2010 a las 16:23:00:
¡Bien dicho Punt!
Igual que en los libros de texto de secundaria se presenta la intervención estatal en educación y sanidad como algo natural. Jamás se enseña a nadie a leer una nómina, de manera que se sepa que parte de su salario no aparece en ella y que se va en impuestos.
punt dijo el día 9 de Diciembre de 2010 a las 11:50:12:
Para eso, que hubieran puesto uno de esos modelos que tienen los calentólogos, en los que se muestra clarísimamente cómo la Tierra se calentará en 100 años hasta asemejarse a un horno.
Lo digo porque una de las principales características de esos modelos es que no se requiere que la Tierra se comporte en la realidad como indica el modelo. Con el modelo basta.
Imagino que los jueguecitos de Trichet serán muy "didácticos". El problema es que están basados en un juego de reglas económicas falsas y presenta situaciones simplistas, artificiales y más que probablemente erróneas. Por ejemplo, se habla de "una serie de eventos imprevistos, por ejemplo, una crisis del petróleo", como si las crisis de materias primas no se pudiesen prever, cuando en realidad responden a las mismas leyes económicas que el resto de circunstancias.
Lógicamente, en los juegos se ocultará el impacto negativo que tiene el papel monopolístico de los bancos centrales, con sus políticas arbitrarias de emisión de dinero y establecimiento de los tipos de interés. Por eso, quienes juegan no aprenden si la existencia de una política económica monopolizada por un banco central es algo bueno o malo, ya que no existe el escenario en el que no existen los bancos centrales y la economía encuentra su propio cauce.
Al final, lo de siempre: llaman "didáctico" a lo que no es más que "propagandístico".
Un saludo.